A medida que se conoce la reactivación de la economía y que indicadores claves como el desempleo, el comercio exterior y el consumo muestran un desempeño positivo, las previsiones de los mercados sobre el crecimiento se fortalecen.
Prueba de ello es que las previsiones para el Producto Interno Bruto de este año comienzan a consolidarse. El BBVA, por ejemplo, estima que la economía crecerá 6,8%, mientras el Bancolombia es más optimista y señala que ese aumento irá hasta el 7,2%.
En sus investigaciones del PIB nacional, el Bancolombia considera en su indicador NowCast, que “entre junio y agosto la actividad productiva se expandió 7,9% anual, lo que representa una moderación frente a lo registrado en el periodo anterior. En la comparación frente a 2019, el ritmo de avance se mantuvo estable. El pronóstico más reciente de variación del PIB para el tercer trimestre realizado a partir de nuestra información es 6,6%. Esto supone una mejora frente a la estimación realizada hace un mes, y supera el último pronóstico promedio de los analistas”.
Consideran que el resultado del segundo trimestre de 12,6% “fue muy cercano a nuestro escenario de proyección (12,5%), y reafirmamos nuestra perspectiva de que el crecimiento del PIB en el 2022 completo será de 7,2%. Por otro lado, este sólido resultado de la economía daría soporte a que continúen los incrementos en la tasa de interés del Banco de la República”.
Los sectores agrícola, minero, financiero e inmobiliario mostraron una buena dinámica en agosto. Por el contrario, evidenciamos una pérdida de tracción en industria, energía, construcción, servicios profesionales, servicios públicos y recreación.
Consumo
Por su parte, el equipo de investigaciones del BBVA Research señala que “en 2022, la actividad continúa sorprendiendo al alza por el gran dinamismo del consumo privado y la inversión en maquinaria y equipo. Estimamos que la economía crecerá 6,8% anual este año. En 2023, el consumo privado se desacelerará gradualmente por las mayores tasas de interés, los efectos base y el menor crecimiento del empleo”.
Señalan que “la inversión en maquinaria y equipo se moderará, mientras que la de construcción tendrá un buen dinamismo. De esta forma, Colombia crecerá un 2,0% en 2023”.
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Sostienen los expertos que “los choques inflacionarios han resultado ser más fuertes y persistentes. La inflación se mantiene elevada, cerrando el 2022 en 9,2% y moderándose gradualmente en 2023 (en 5,0%), a pesar de la debilidad de la demanda interna. La inflación se ha dispersado desde los alimentos hacia una base más amplia de bienes. En este escenario, el Banco Central continuará elevando el tipo de interés”.
Indican los investigadores que “el desequilibrio fiscal continúa siendo un reto para los próximos años a pesar de la mejora reciente, tanto en el balance como en la deuda como porcentajes del PIB.
Sin embargo, destacan la recuperación del empleo que es fuerte desde finales de 2021, aún más en el caso formal.
Intereses
Por otra parte, los analistas del Bancolombia manifiestan que “los vientos de cara desde la economía internacional y las mayores tasas de interés empezarán a tener un impacto más palpable sobre la producción local próximamente. En particular, el ciclo de incrementos de las tasas de interés debería afectar la demanda interna de forma importante en 2023, en línea con el rezago que suelen tener los movimientos en la postura de política monetaria sobre el desempeño de los agregados macroeconómicos”.
Más aún, el trámite de la reforma tributaria, con el impacto mediático y cómo esto afecte la confianza del consumidor y la toma de decisiones de gasto, puede ser otro determinante de la desaceleración que vivirá la economía.
“Pero esta dinámica viene ya capturada en nuestro escenario de proyección vigente. Por otro lado, este sólido resultado de la economía daría soporte a que continúen los incrementos en la tasa de interés del Banco de la República. En la medida en que la brecha del PIB se habría vuelto más positiva de lo que ya preveía el equipo técnico del Emisor, se hacen más claras las presiones que la demanda interna está ejerciendo sobre los precios y la necesidad de que la política monetaria logre una postura más contundente para moderarlas”, indican.
Al mismo tiempo, los expertos aseguran que “en este orden de ideas, y ante la expectativa de que la inflación anual continuaría ganando terreno, consideramos que en septiembre se subirá la tasa de interés de intervención entre 75 puntos básicos y 100 puntos”.