La confianza comercial aumentó 7,1% en julio luego de cinco meses en terreno negativo. De acuerdo con Luis Fernando Mejía, director ejecutivo de Fedesarrollo, “frente al mes anterior, el incremento en el Índice de Confianza Comercial obedeció principalmente a una disminución en el nivel de existencias y a una mejoría de las expectativas de situación económica para el próximo semestre. El incremento del Índice de Confianza Industrial se explica principalmente por un aumento en el volumen actual de pedidos y en las expectativas de producción para el próximo trimestre”.
Cabe apuntar que el Índice de Confianza Comercial (ICCO) se hace a partir de tres aspectos: la percepción de la situación económica de la empresa, el nivel de existencias y sus expectativas para el próximo semestre; a su vez, se evidencia que sus perspectivas pasaron de -7,3 en junio a 5,7.
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Por su parte, el resultado frente a julio de 2019 se debe principalmente a una reducción de 41,7 puntos en el indicador de expectativas de situación económica para el próximo semestre y a la disminución de 31,5 puntos en el indicador de situación económica actual de la empresa. Entretanto, el indicador de nivel de existencias disminuyó 17,3 puntos.
Confianza Industrial
De otra parte y de acuerdo con la encuesta de Fedesarrollo, en julio, el Índice de Confianza Industrial (ICI) se ubicó en -8,5% en su serie original, lo que representa un incremento de 12,3 puntos frente a junio de 2020 y una reducción de 17,8 puntos relativa a julio de 2019. Por su parte, su promedio móvil trimestral fue de -16,9%, lo que equivale a un aumento de 9,1 puntos frente a la misma medición del mes pasado.
La reducción en la confianza industrial respecto a julio de 2019, se debe a una caída de 26,3 puntos en el indicador de expectativas de producción para los próximos tres meses, una disminución de 19,1 puntos en el indicador de volumen actual de pedidos y al incremento de 8 puntos en el nivel de existencias.
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Afectación
De otro lado, con el objetivo de identificar el grado de afectación al sector empresarial causado por el Covid-19 y las medidas de contención decretadas por el Gobierno nacional, la Encuesta identificó cuatro aspectos principales que se pueden ver afectados. Estos son: estado de operación de la empresa, expectativas de cierre, empleo y liquidez para responder con sus obligaciones.
Señala que en julio, respecto al estado de operación de la empresa, el 63,7% de las firmas encuestadas no presentó una afectación en su funcionamiento, el 34,7% operó parcialmente mientras que el 1,2% tuvo un cierre temporal y el 0,4% restante cerró permanentemente. De las compañías que contaron con algún grado de afectación en su funcionamiento, el 95,1% afirmó que este tenía relación con el covid-19.
En referencia al mes anterior, en julio, el porcentaje de empresas que están totalmente en funcionamiento disminuyó 6,4 puntos, mientras que la proporción que está parcialmente en funcionamiento aumentó en 5,7 puntos. La cifra de unidades empresariales cerradas temporal y permanentemente aumentó en 0,2 y 0,4 puntos, respectivamente.
En los próximos tres meses, el 6,2% de las empresas espera realizar un cierre temporal, el 1,2% un cierre permanente, mientras que el restante 92,4% no planea realizar ninguna alteración en su funcionamiento.
Respecto a junio, la proporción de empresas que no espera ningún cierre en los próximos 3 meses aumentó en 3,9 puntos; así mismo, en cuanto a las compañías que esperan un cierre permanente, este aumentó en 0,6 puntos, mientras que aquellas que esperan una interrupción temporal disminuyeron en 4,5 puntos. De las unidades empresariales que prevén afectar su operación, en julio el 92,1% afirmó que esta decisión tiene relación con el Covid-19.
Con respecto a enero de 2020, en junio, el 0,2% de las empresas incrementó más de 50% el número de empleados, el 0,8% lo aumentó más de 25%, el 8,8% lo amplió entre 1% y 25%, mientras que el 44,7% de estas afirma haber mantenido inalterado su personal.
Empleo
Asimismo, el 37,3% de las empresas redujo sus empleados en un rango entre el 1% y el 25%, el porcentaje de firmas que disminuyó el número de sus trabajadores entre el 25% y el 50% fue de 6,6%, y el restante 1,6% lo disminuyó más del 50%.
En comparación con junio, el porcentaje de empresas que aumentó el número de empleados se incrementó 4,1 puntos, mientras que el porcentaje de compañías en donde se mantuvo inalterado el número de empleados disminuyó en 5,8 puntos. Por otro lado, la proporción en las que el número de empleados disminuyó fue de 1,7 puntos.
Durante el mes reportado, el porcentaje de encuestados que considera que tiene menos de 2 semanas de liquidez para atender todos sus compromisos es 11%, mientras que el 28,6% de los encuestados afirma que tiene de 2 a 4 semanas de liquidez.
El porcentaje de encuestados que tiene entre 4 y 6 semanas de solvencia es de 22,3%; a su vez, el 16,6% de los encuestados afirma que tiene entre 6 a 8 semanas de liquidez, el 8%% de los encuestados considera tener entre 8 a 12 semanas, mientras que el restante 13,5% afirma tener la capacidad de cumplir con todos sus compromisos por un periodo superior a 12 semanas.
Según Camilo Herrera, socio fundador de Raddar, “hay que tener en cuenta que muchas personas perdieron su ingreso y evidentemente las dinámicas de gasto serán distintas. Sin embargo, en el gasto de julio y algunos que tenemos de agosto, se ve cómo lentamente hay una dinámica de recuperación frente al mes anterior y frente al 2019”.