Según el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, las micro, pequeñas y medianas empresas generan cerca del 78% del empleo en Colombia, una cifra que devela la importancia de este tipo de compañías en nuestro país.

Sin embargo, a pesar de ser el principal generador de trabajo formal en la nación, las Mipymes siempre han puesto en evidencia la necesidad de una reforma laboral y una reforma tributaria, que le permita a este segmento de la economía nacional poder crear más empleos de calidad y reducir la carga impositiva.

EL NUEVO SIGLO habló con Rosmery Quintero, presidenta de Acopi, el gremio que reúne a los micro, pequeños y medianos comerciantes, acerca de cómo ven las propuestas que hasta ahora se conocen de lo que será la próxima reforma tributaria.

“Cuando nosotros estamos mirando la reforma tributaria, tenemos que reconocer, primero, que es totalmente cierto que recaen muchos impuestos sobre el sector empresarial y que hay que buscar el equilibrio sobre los ingresos más altos en personas naturales, estamos totalmente de acuerdo con revisar las exenciones y por otro lado ir unificando y mejorar las condiciones de renta en las Mipymes”, señaló la dirigente gremial.

El 4xMil

Para Quintero, una de las medidas que se deberían reconsiderar es la de mantener el 4xMil: “Para nosotros el porcentaje que hoy prima sobre renta es muy significativo, muy alto y, por otro lado, estamos convencidos de que, a pesar de que el gobierno dice que no va a quitar este impuesto, si queremos generar empleo, se debe quitar por lo menos ese tributo que se aplica para todos los costos de los movimientos salariales; este debe eliminarse para incentivar mucho más el empleo”, explicó.

La dirigente añadió, en cuanto a la formalización, que también se amerita que los costos de ser formales disminuyan. “Vale la pena seguir revisando toda esa estructura fiscal para que sea más atractivo ser formal”.

Esta medida ayudaría a fomentar la formalidad, teniendo en cuenta que solo cerca del 40% de empleo que se genera en el país cumple con estas condiciones de ley.

Exenciones

Por otro lado, las Mipymes siempre han pedido a los diferentes gobiernos que permitan que las empresas de este segmento tengan beneficios tributarios importantes, como los que tienen las grandes industrias, o que estos se nivelen para generar mejor competitividad.

“En eso estamos totalmente de acuerdo que debe darse una revisión, porque si aplicamos el principio de equidad no hay equidad realmente, que considere el tamaño y la capacidad, sobre todo de la micro y la pequeña empresa. Vale la pena porque es un recurso muy significativo y muchas de las exenciones que creen que pueden llegar a impactar a las Mipymes son totalmente mentira, no se dan por la misma estructura y los ingresos que se manejan desde las pequeñas empresas. En ese sentido, de todas formas hay que considerar que nosotros somos unas cadenas productivas que nos integramos”, explicó Quintero.

Incluso, la presidenta de Acopi cree que un tema que debe revisarse con ojo agudo es el de las Zonas Francas, pues en ellas existen diversas Mipymes: “Vale la pena revisar temas como las Zonas Francas, donde un gran porcentaje de las compañías que se encuentran ubicadas allí tienen la condición de pequeñas empresas. Entonces, desde Acopi estamos de acuerdo porque es un tema sobre el que hemos conversado, en el que deben revisarse las exenciones y buscar mucho más equilibrio para no seguir gravando al sector empresarial”, puntualizó.

Expectativas

Más allá de la reforma tributaria que plantee el gobierno entrante de Gustavo Petro, el panorama económico mundial sigue siendo un tema que debe evaluarse, y en ello hay preocupación de las empresas, con la subida de tasas de interés por parte del Banco de la República, además de la inflación que no cede y las presiones ejercidas desde el exterior por parte de la FED y los rezagos de la guerra en Ucrania.

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“La subida de la tasa es parte de los instrumentos que se utilizan para contrarrestar en algo la inflación. Va a tener su tiempo para volver a una nueva normalidad, esperemos que se dé, pues no es un fenómeno solamente a nivel Colombia, es un fenómeno mundial y sencillamente vale la pena revisar el tema de las tasas cuando estamos en unas circunstancias más favorables”, asegura Rosmery Quintero.

Sin embargo, el alza en los créditos sí podría tocar a este segmento: “En el sector empresarial de las Mipymes, muchos todavía están en proceso de reactivación, donde aún se necesita acceso al crédito. Entonces, en ese sentido yo creo que, si bien es cierto un porcentaje muy importante accede a crédito, a esas precisamente les va a afectar”, recalcó.

También explicó que, “por otro lado, hay un indicador que se ha ido incrementando cada periodo en que nosotros aplicamos la encuesta de desempeño empresarial, y es que hay mucha reinversión de los dividendos empresariales. En ese sentido, creo que esa es una de las formas como se están financiando las Mipymes colombianas”, añadió.

Esas reinversiones de los dividendos son una de las mayores formas de apalancamiento de las pequeñas y medianas empresas en el país. Sin embargo, el gobierno al querer gravar con mayor fuerza los dividendos y las ganancias ocasionales podría impactar sobre esta reinversión, tesis que no comparte Rosmery Quintero, pues estas empresas manejan montos aún muy bajos.

La creación de empresas

El balance en cuanto a la creación de empresas en el país durante el 2021 fue positivo, según lo muestran las cifras de la Confederación Colombiana de Cámaras de Comercio (Confecámaras), que reflejaron un aumento del 10,6% frente a 2020.

El Informe de Dinámica de Creación de Empresas realizado por la entidad precisó que entre enero y diciembre se crearon 307.679 empresas en todo el territorio nacional, el 99,5% de ellas microempresas.

Justamente, la creación de microempresas creció en 10,6% con respecto a 2020, al pasar de 276.891 a 306.140. Las pequeñas empresas crecieron 9,1%, al pasar de 1.328 a 1.449.

El reporte, que recoge información del registro mercantil de las 57 cámaras de comercio que operan en el país, también señaló que, del total de nuevas empresas inscritas, 74,4% son personas naturales y 25,6% sociedades.

Se anotó que las sociedades crecieron 14,6% respecto a 2020, al pasar de 68.853 a 78.880 en 2021. Por su parte, las matrículas de personas naturales pasaron de 209.449 a 228.799, lo que representó una variación positiva de 9,2%.

Otro dato para destacar es que, de las personas naturales matriculadas en 2021, el 61,3% fueron mujeres y el 38,7% hombres. Por su parte, en las sociedades creadas durante el mismo periodo, el 23,2% tiene una participación media–alta de las mujeres en el capital inyectado a la empresa.

“Uno de los principales activos de la sociedad son sus empresarios, que trabajan sin descanso por sacar adelante sus emprendimientos y generar nuevas oportunidades, siendo ejemplo para el país”, comentó Julián Domínguez, presidente de Confecámaras.

Según cifras del Registro Único Empresarial y Social (RUES), el 52,2% de las empresas creadas entre enero y diciembre de 2021 se constituyeron creando al menos un empleo.

Y de estas empresas, el 40% tiene mujeres dentro de su planta de personal y el 9% las tiene ocupando cargos directivos.

Entre los sectores más dinámicos en la creación de empleo se encuentran comercio, alojamiento y servicios de comida, industrias manufactureras, actividades profesionales, científicas y técnicas y construcción, los cuales explican el 76,5% de la participación total del número de nuevas empresas empleadoras.