Si se tienen en cuenta las consultas y encuestas de los  mercados sobre las tasas de interés, todo indica que en la reunión de mañana la Junta Directiva del Banco de la República las dejaría estables.

Esto pese a los reclamos del Gobierno para que el Emisor alivie la política monetaria y baje el costo del dinero.

Incluso, según una última consulta del Emisor entre los analistas financieros, no se esperan modificaciones, sobre todo cuando la Reserva Federal de Estados Unidos no ha decidido reducir los tipos de interés.

De allí que el mercado, en las más recientes encuestas, no espera mayores sorpresas sobre lo que venga para la política monetaria que marcará las últimas decisiones sobre lo que ocurra en 2023.

De acuerdo con la medición de Fedesarrollo, para esta ocasión las tasas de interés en Colombia se mantendrían en el 13,25 %.

A ojos del mercado si bien sigue el enfriamiento de la inflación, hay todavía escenarios de riesgo que estaría sopesando el Banco de la República y que le llevarían a mantener una postura de mesura sobre lo que puede llegar a pasar.

Pero para el cierre de año sigue existiendo la posibilidad de que el Banco apruebe una primera baja en las tasas de unos 50 puntos básicos.

Viabilidad

Leonardo Villar, gerente del Banco de la República, fue enfático en que aún no es viable bajar las tasas de interés en Colombia. Por su parte, Olga Lucía Acosta, codirectora del Banco de la República, dijo en entrevista con Bloomberg que de momento una baja prematura de las tasas de interés podría menguar la credibilidad del Emisor.

Y es que la presión que sigue viendo la inflación en Colombia, ahora del lado de los energéticos, explica en buena parte por qué no hacer menos restrictiva la política monetaria del país.

Sumado a lo anterior, el mercado espera también que se sientan efectos sobre la inflación por lo que pueda verse del fenómeno de El Niño en variables como el precio de los alimentos o de los energéticos.

Lo cierto es que para inicios del 2024 el mercado sí hace apuestas para que Colombia cuente con unas tasas de interés abajo de la barrera del 13 %.

La senda, dependiendo de qué tanto siga desacelerándose la inflación, llevaría a que el año entrante las tasas de interés en el país vuelva a ser de un solo dígito.

Aunque ha advertido el mismo Banco de la República que se van a sopesar los datos macroeconómicos de cada Junta que lleven a la toma de una decisión mucho más acorde a las necesidades de la economía nacional.

Detrás de todos

En todo caso, Colombia no ha podido seguirles el ritmo a algunos de sus pares regionales sobre la baja en las tasas de interés pues la inflación en Colombia cae a un menor ritmo.

Brasil, Perú y Chile ya han flexibilizado su política monetaria a medida que la inflación se enfría en América Latina, pero en Colombia las presiones sobre los precios al consumidor han caído más lentamente de lo previsto en los últimos seis meses, razón por la cual el Banco necesita garantizar que la inflación vuelva a su meta objetivo para fines de 2024.

A cierre de año se espera que la inflación en Colombia termine cerca del 9,8 %, con el riesgo de que pueda ser, de nuevo, de doble dígito.

En las declaraciones de Acosta, la codirectora dijo que “el Emisor podría poner en riesgo su credibilidad si se apresura a recortar las tasas de interés prematuramente”. "Hay mucho riesgo en aflojar antes y que sea necesario devolverse", dijo la codirectora.

En su última reunión, el Banco mantuvo su tasa de interés clave en el 13,25 %, lo que desafía la presión de Petro y del ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, quienes piden un recorte a medida que el crecimiento económico se desacelera drásticamente. La tasa de interés en Colombia es la más alta entre sus pares regionales.

"Aquí nos toca persistir en la tarea", dijo Acosta. "Hay que esperar mejores resultados y yo creo que van a estar pronto".

El Banco también necesita "mayor seguridad" sobre las expectativas de inflación, aunque éstas van en la dirección correcta, dijo. Los economistas encuestados por el banco central pronostican ahora el primer recorte de tipos en diciembre.