“El bienestar colectivo de una sociedad pasa por el sector empresarial”. Con esta premisa contundente, Julián Domínguez Rivera, presidente del Consejo Gremial Nacional (CGN) y quien también está al frente de Confecámaras, denota todo el significado para el país de lo que puede aportar desde la más pequeña microempresa hasta los grandes conglomerados.
Pero la intención de Domínguez va mucho más allá de una frase. Es tratar de inculcar a todos los colombianos el sufrimiento y el impacto económico que hoy reciben las empresas, primero con las restricciones y cuarentenas producto de la pandemia, y ahora, cuando empezaban a recuperarse, por culpa de los paros y bloqueos.
Con razón, dice a EL NUEVO SIGLO, que según una encuesta realizada por Confecámaras “el 76% de las empresas dice que está operando por debajo de la mitad de su capacidad, hay cerca de un 90% que no ha podido producir porque no tiene acceso a los insumos, a las materias primas, pero lo que es más grave es que el 35% dice que tiene que cerrar parcialmente y ya hay un 13% que ha cerrado definitivamente”.
La elocuencia de estas cifras sobre el impacto del problema social que está dejando la actual coyuntura, podría hacer que el presidente del empresariado se resigne.
Pero no es así. Hoy más que nunca, Domínguez, que está al frente del CGN desde diciembre de 2020, organismo que reúne a los 29 gremios más representativos del país, denota optimismo y carácter para enfrentar la situación y señala que hay que dialogar para solucionar el problema que hoy soporta la nación. Aún así, suelta su energía positiva al advertir: “Colombia es un país resiliente y de esta crisis vamos a salir”.
A prueba
EL NUEVO SIGLO: ¿Ustedes como empresarios cómo analizan este problema social que hoy vive el país con el paro nacional y qué alternativas o medidas se pueden tomar para salir pronto de esta situación?
JULIÁN DOMÍNGUEZ RIVERA: En primer lugar, hay que decir que la capacidad de la sociedad colombiana para soportar las crisis y salir adelante es muy grande. Colombia es un país resiliente y de esta crisis vamos a salir. Hay una circunstancia que hace que esta crisis sea distinta, es la mezcla entre el impacto de la pandemia que ha sido brutal y el impacto que está generando el paro especialmente por los bloqueos. Esa mezcla realmente nos está poniendo a prueba como sociedad, y en esa condición lo más importante en este momento es permitir que los derechos fundamentales se puedan ejercer a plenitud, es decir que haya libre circulación y haya movilidad y el derecho al trabajo se respete y que se logre realmente el abastecimiento de la población, ya de por sí golpeada en su alimentación por cuenta de la pandemia y ahora por cuenta de que los bloqueos no permiten llegar los productos alimenticios, incluso ni los farmacéuticos y hospitalarios a los centros de consumo.
ENS: ¿Cuál sería ese otro elemento fundamental para solucionar la crisis?
JDR: El diálogo es muy importante y así resuelven las diferencias las sociedades civilizadas, en consecuencia, el diálogo debe ser un instrumento para lograr canalizar las solicitudes que está haciendo la población y para poder especialmente atender a la población joven que ha sido muy golpeada. Digamos, las cifras del Dane muestran cómo los jóvenes que ni estudian ni trabajan han pasado de representar el 22% al 27%, entonces hay allí la necesidad de buscar oportunidades de empleo y de emprendimiento para ellos.
Iniciativas
ENS: Cuando vemos que pasan los días, que las peticiones del Comité de Paro se confunden con las que están pidiendo los jóvenes, ¿no cree que de pronto alguien quiere pescar en río revuelto?
JDR: Una característica que han tenido dificultad para identificar los voceros del paro y eso ha llevado a que nosotros estemos propiciando diálogos regionales también, que han sido reconocidos por el Gobierno nacional y esto es muy importante para que no haya nuevas frustraciones, es que verdaderamente las voces de todos los colombianos sean reconocidas, incluso de aquellos que no están en el paro, que están sufriendo y están aspirando a también ser escuchados.
ENS: Desde el punto de vista de los empresarios que ya venían afectados por los cierres y las restricciones durante la pandemia, ¿qué tanto se ha acelerado este problema ahora con los paros y los bloqueos?
JDR: Nosotros, a través de Confecámaras, acabamos de hacer una gran encuesta nacional con las cámaras de comercio y el 76% de las empresas dice que está operando por debajo de la mitad de su capacidad. Es decir está operando a media marcha, también nos están diciendo hay cerca de un 90% que no ha podido producir porque no tiene acceso a los insumos, a las materias primas, pero lo que es más grave es que el 35% dice que tiene que cerrar parcialmente y ya hay un 13% que ha cerrado definitivamente. También es grave en esta encuesta, que es la tomada del pulso más reciente, que el 18% dice que va a reducir el personal contratado y eso pues es supremamente grave pues porque no podemos entrar en una espiral donde se está buscando la reivindicación y el empleo, pero al mismo tiempo, por cuenta de los bloqueos y las vías de hecho y el vandalismo, se está deteriorando el empleo para los colombianos.
Por eso hemos dicho que no se puede convertir el paro en un monstruo de dos cabezas donde el vandalismo retroalimenta las peticiones pacíficas del paro y la conducta pacífica propicia el vandalismo. Deben cesar los bloqueos porque esto está generando un impacto supremamente grave a la economía. Cerca de $500 mil millones diarios es la pérdida y el impacto en la productividad del país.
Vías de hecho
ENS: Eso es precisamente lo que están solicitando casi todos los sectores, que el Comité de Paro rechace los bloqueos, pero no lo han hecho. ¿Qué piensa de eso?
JDR: Es lamentable que entiendan las vías de hecho y la vulneración de los derechos fundamentales como una acción legítima, eso es no respetar las instituciones del país, porque no es posible por las vías de lograr alcanzar acceso, por ejemplo, a beneficios o presupuestos esa es una verdadera extorsión que se estaría haciendo si se pretende ahorcar más al país para lograr beneficios.
ENS: ¿No es una ironía que lo que la economía ganó en el primer trimestre, incluso hasta abril de este año, es decir alrededor de $11 billones, se ha venido perdiendo en un mes de paro?
JDR: En mayo del año pasado nosotros teníamos más de 5 millones de desempleados y ya estábamos recuperando un millón 200 mil empleos, es decir, ya se había logrado vincular a la actividad laboral más de 1 millón de empleos y se venía reactivando la economía. El primer trimestre de este año el PIB creció el 1.1%, eso significa que había un crecimiento positivo cuando habíamos tenido un decrecimiento en el año pasado de 6.8%, entonces sí veníamos en un proceso de recuperación a pesar de tener que sortear los cierres que habían sido nefastos para la economía, especialmente en febrero. Con todo y eso estábamos en un periodo de recuperación. Ahora viene este cierre absurdo que no se entiende cómo, para reivindicar a los más desvalidos, se les impide circular y se le impide el derecho al trabajo y entonces el daño es muy profundo.
El daño
ENS: ¿Pero ese daño a las empresas va a tardar en solucionarse?
JDR: El problema no es solo el daño que se está produciendo en este momento, es que la recuperación de algunas de las actividades productivas tarda mucho, por ejemplo, las calderas de las empresas industriales que se han apagado tardan meses en poderse reiniciar, entonces es el daño hacia adelante también que están haciendo con esta conducta. Por otro lado, el querer que no se actúe de ninguna manera por las fuerzas del orden, nosotros queremos propiciar el diálogo, incluso hemos reclamado estar en este diálogo nacional y creemos que esa es la vía correcta, como lo he dicho, de solucionar este problema, pero sin duda, no sometidos a la extorsión de los bloqueos.
ENS: Ya veíamos que el Gobierno retiró el proyecto de reforma tributaria del Congreso, ahora se trata de diseñar un texto que por lo menos cubra la ayuda social que requiere con urgencia del país. ¿Ve usted que de pronto esto podría adelantarse?
JDR: Sí, perdimos el grado de calificación por parte de Standard and Poor’s, eso afecta el mercado financiero colombiano porque seguramente aumentan las tasas de interés, se devalúa más el dólar y se genera un clima adverso a la inversión, entonces todo eso era lo que se pretendía impedir con mejorar la condición fiscal del país donde se ha aumentado mucho el gasto, para atender precisamente la crisis generada por la pandemia. Entonces, seguramente, habrá la necesidad de buscar recursos fiscales para atender la subsidiaridad del ingreso solidario, familias en acción, la subsidiaridad para el empleo que es lo que se pretende finalmente, y de esa manera ayudar a que las personas que han perdido su trabajo y las personas que están sin recursos puedan sobrellevar en esta crisis, por lo menos, algunas necesidades básicas.
Propuesta
ENS: En este contexto, ¿qué propuesta han hecho ustedes al país?
JDR: Nosotros hemos hecho una propuesta del Consejo Gremial Nacional en el sentido de que realmente las cargas las asume el sector empresarial y las asumen las personas naturales que tiene más altos ingresos. No se toca la que se denomina clase media y menos aún a los pobres donde no se incrementará el IVA ni nada y, en consecuencia, los productos básicos. Entonces es buscar recursos donde pudiera haber capacidad para pagar estos impuestos, pero nos preocupa mucho esta situación de los bloqueos pues lo que está haciendo es castigando muy duramente al tejido empresarial colombiano que es el 98% de micros y pequeños negocios, que serían quienes podrían ayudar a la solución de sobrellevar cargas de nuevos ingresos fiscales y generar empleo. Los más afectados son los micronegocios en este momento.
ENS: Ante este panorama y esta situación, ¿ha cambiado la perspectiva que usted tenía al comienzo del año sobre el rumbo de la economía?
JDR: Pues nosotros después de esta situación seguimos aspirando a crecer el 5% del Producto Interno Bruto, es decir, lograr tener un crecimiento positivo este año después de tener un decrecimiento del 6.8% el año pasado. Pero de prolongarse esta pandemia habrá que hacer ajustes de esta proyección y eso implica que un país que no crece o que crece de manera muy reducida, pues le resta oportunidades para poder afrontar temas de pobreza, por ejemplo, donde hemos retrocedido 20 años por cuenta de la pandemia. Entonces hay que entender bien que el bienestar colectivo pasa por el sector empresarial que es quien paga impuestos, el que genera empleo e irradia desarrollo. Es desafortunado que a veces el empresario no es considerado realmente parte de la solución, sino parte del problema.
ENS: ¿Qué mensaje positivo como líder empresarial le manda al país?
JDR: El llamado es a que verdaderamente hagamos el gran diálogo nacional por los cauces legales, por los cauces civilizados. Este diálogo debe conducir a buscar mayor empleo, mayor bienestar para los jóvenes, a tratar de amortiguar toda esta situación que nos generó la pandemia y somos optimistas de que seremos capaces de superar esta crisis, en la medida que haya en realidad conciencia de no agravarla con un espiral de violencia que nos está haciendo mucho daño.
EL PRESIDENTE del Consejo Gremial Nacional, Julián Domínguez Rivera, cree que el país va a salir de la actual situación y ve con optimismo el rumbo de la economía. /Cortesía
PARA LOS empresarios, es incomprensible que con los bloqueos se esté afectando la situación de las compañías y generando mayor desempleo. /ENS
La creación de empresas
ENS: ¿A pesar de la situación que vive el país, cómo va la creación de empresas este año?
JDR: En el primer trimestre fue importante, se crearon cerca de 90.000 empresas y se aumentó respecto del primer trimestre del año pasado, cerca de un 10%. Esto es muy importante, pues incluso son empresas también de jóvenes. Por ejemplo, el año pasado se crearon 50.000 empresas de jóvenes, de personas jóvenes y esto es muy importante poderlo acompañar desde lo que venimos haciendo en las cámaras de comercio.
Por Gustavo Veloza Posada / Periodista EL NUEVO SIGLO