“Gobierno debe subsidiar nóminas de empresas durante 4 meses”
El presidente de Acopi Bogotá, Alfredo Castellanos, dice que con estos alivios se salvan las empresas, pero con los créditos se quiebran
Los pequeños y medianos empresarios afiliados a Acopi, insistieron en que requieren de subsidios para poder pagar sus nóminas y para salvar sus empresas. El presidente Ejecutivo del gremio en Bogotá y Cundinamarca, Alfredo Castellanos, dijo a EL NUEVO SIGLO, que no pueden tener acceso al crédito porque no son sujetos de crédito para los bancos ante la falta de ingresos, pero que así los tuvieran eso no sería de gran ayuda porque no podrían pagarlos y se quebrarían.
EL NUEVO SIGLO: ¿Cómo está la situación de las pequeñas y medianas empresas con la actual coyuntura?
ALFREDO CASTELLANOS: La situación de las empresas es realmente crítica porque ya se cumplió la segunda quincena de la cuarentena y estamos en una situación que la mayoría de las empresas no alcanzan a pagar la quincena completa. En este momento, yo incluido como empresario, estamos haciendo una reducción del salario de los empleados. La mayoría de las empresas y los afiliados de Acopi Bogotá, estamos reduciendo el salario desde el 25%, 30% y en algunos casos hasta el 50% del sueldo a nuestros empleados, esto con el objetivo de preservar el empleo y el tejido empresarial.
ENS: ¿Cuál cree que debería ser la solución a esta situación?
AC: La solución es que el Gobierno asuma el papel que le corresponde como regulador de la economía en tiempo de crisis y como responsable de los problemas sociales y de la supervivencia de la gente.
Y debe asumir el costo de las nóminas, por lo menos parcialmente, por lo menos durante cuatro meses teniendo en cuenta que la cuarentena se levante a finales de abril. ¿Por qué digo de cuatro meses? Porque la economía no va a llegar a su top dos meses después, eso no es inmediato, entonces debería subsidiarnos porque para el gobierno es más barato ayudar a las empresas por ser fuente de empleo que después dar subsidios a las personas naturales cuando ya no haya empresas que rescatar ni puestos para ocupar. Es decir, sin duda es más barato subsidiar para salvar las empresas que reconstruir luego el tejido empresarial después que se haya desbaratado.
La ayuda del Estado
ENS: ¿Ante esta situación tan crítica qué se puede hacer?
AC: La única solución, como en otros países como Perú, es que el Gobierno nos ayude, que la mano del Estado entre a solucionar este problema social, porque este es un problema social, subsidiando el pago de la nómina de las empresas en alto porcentaje, de las empresas pymes que son las que no tiene reservas ni utilidades guardadas para asumir el pago de los salarios, no hay ahorros porque no hay caja, una empresa sin ingresos un mes largo no resiste. Pagamos la primera quincena pero para esta segunda no hay plata.
ENS: ¿Qué tanto empleo se va a perder con esta situación?
AC: En la última encuesta que hizo hace poco Acopi, antes de Semana Santa, mostró que el 20% de las empresas manifestaron su intención de despedir hasta el 50% de los empleados. Es decir se perderían entre dos y tres millones de puestos, de empleados para la calle. Es decir lo que está sucediendo es una pandemia laboral y empresarial.
Los créditos
ENS: ¿Es decir que las empresas no van a aprovechar los créditos que está ofreciendo el Gobierno para financiar sus nóminas?
AC: Esas ayudas pueden estar bien intencionadas por parte del Gobierno pero no son realistas, porque los bancos prestan si el horizonte temporal de las empresas es halagüeño y en este momento no hay una sola empresa ni en Colombia ni en el mundo de las mipymes, que tengan un horizonte despejado.
Por otra parte, los bancos tienen la obligación de colocar sus recursos cuando tienen garantías de recibir sus pagos, por eso los créditos anunciados por el Gobierno para las mipymes no están llegando a las empresas, estamos viendo que son raros los casos que alguna empresa haya recibido un crédito. Con los subsidios se salvan las empresas, con los créditos se quiebran.
ENS: ¿Entonces no han recibido nada?
AC: Lo que hemos recibido es un refinanciamiento de los créditos antiguos, pero no recursos frescos que es lo que necesitan las pymes. Ninguna empresa y menos una pyme puede mostrar flujo de caja proyectado que le dé tranquilidad a los bancos y ellos tienen la obligación y la responsabilidad de manejar la plata del ahorro nacional y no son maniflojos, no pueden serlo, sería irresponsable por parte de ellos.
ENS: ¿Cuánto representa la nómina mensual de las pymes?
AC: Representan unos $7 billones mensuales, si nos pagan parcialmente la nómina y eso lo puede controlar el Gobierno mediante la información del PILA, es decir de los aportes parafiscales.
ENS: ¿De dónde cree que el Gobierno puede sacar esos recursos?
AC: Los recursos se puede sacar, primero en que los empresarios van a tener que pagar más impuestos, sobre todo las empresas grandes, segundo con las reservas internacionales y tercero mediante una emisión o crédito al Gobierno por parte del Banco de la República, además también se pueden utilizar los créditos de los organismos multilaterales como el Fondo Monetario Internacional o el Banco Mundial.
Yo creo que con ello el Gobierno podría invertir entre el 7% y 10% del Producto Interno Bruto en estos subsidios, no tanto como lo están haciendo los países industrializados. Es que como dicen los entendidos y analistas hasta ahora solo han invertido el 1% del PIB en ayudas y mire que Perú si está pagando las nóminas de las empresas y también Brasil.
ENS: ¿A cuánto llegan las pérdidas de las empresas por esta parálisis y el aislamiento de la población?
AC: Si las 1,5 millones de mipymes generan utilidades por casi $12 billones al año, eso es lo que vamos a perder este año, pero lo más importante es que los empresarios estamos acostumbrados a perder y ganar y lo más grave es la destrucción del aparato productivo nacional y del empleo. Por eso es que las empresas extranjeras cuando invierten aquí no llegan y crean una nueva empresa sino que compran una que esté operando, saben que arrancar de ceros es mucho más costoso.