REACCIONES encontradas en el país político generó ayer la nueva andanada de críticas del ex presidente Álvaro Uribe contra el mandatario Juan Manuel Santos.
La razón de este nuevo alud de señalamientos y réplicas del ex presidente fue el contenido de una entrevista del jefe de Estado a la cadena CNN, en donde fue interrogado, entre otros asuntos, sobre las razones de su distanciamiento con Uribe.
A medida que Santos iba contestando los interrogantes de la periodista Ángela Patricia Janiot, Uribe iba replicándole vía Twitter. Ayer en la mañana volvió a cargar por el mismo medio, siempre con duros epítetos y descalificaciones.
Uno de los aspectos que más enfureció al ex mandatario fue que Santos aseguró que la manzana de la discordia entre los dos fue el nombramiento como ministros de Germán Vargas (Interior), Juan Camilo Restrepo (Agricultura) y Rafael Pardo (Trabajo).
En uno de sus mensajes, Uribe acusó al Jefe de Estado de mentiroso, insinuó que está a favor de la legalización de la droga y hasta criticó su cambio de relación con el presidente de Venezuela Hugo Chávez y otros mandatarios.
El presidente del Directorio Nacional Conservador Efraín Cepeda expresó que Santos ha hecho un gran esfuerzo para concertar la unidad de los colombianos y explicó que por supuesto el país es testigo de las diferencias que se vienen presentando desde hace varios meses, pero “que vale la pena un acercamiento”.
El presidente de la Comisión Primera del Senado, el liberal Luis Fernando Velasco, expresó que “el presidente Santos fue un poco duro al recordarle esa nostalgia de poder al expresidente Uribe, pero es que eso es evidente”; y añadió que prefiere leer tratados de hombres de paz y no frases de 140 caracteres: “Cualquier ciudadano se da cuenta que el presidente Uribe podrá seguir comentando y podrá seguir haciendo importantísimas disquisiciones en Twitter con 140 caracteres, pero yo prefiero leer los tratados de hombres de ciencia política que escriben profundamente y desarrollan bien sus ideas y no los trinos de algunas personas con nostalgia de poder”.
El presidente del Congreso, Juan Manuel Corzo, del Partido Conservador, dijo que el ex mandatario ya no tiene incidencia en el Congreso, pero sí es muy fuerte el apoyo del que sigue gozando en las regiones.
Para Corzo este conflicto “tenía que hacer erupción y al fin el volcán reventó. Eso está bien porque zanja una disputa por todos los medios”.
El senador conservador César Tulio Delgado reprochó la actitud de Uribe y aseguró que “hizo historia en Colombia y no debería servir de obstáculo o de piedra en un proceso que la democracia puede generar, pues ahora se está gobernando bajo la cabeza del presidente Juan Manuel Santos”.
Una posición mucho más conciliadora y menos radical sobre el cruce de acusaciones tuvo el senador Juan Carlos Vélez, de La U, quien admitió que “definitivamente hay un distanciamiento ideológico entre el ex presidente Uribe y el Presidente porque ha habido puntos de divergencia. Entonces, a medida que va adelantando el Gobierno y que se van presentando nuevas situaciones de diferencias, obviamente el distanciamiento va a ser mayor; por eso es que a eso toca buscarle una salida”.
Vélez anunció que para canalizar las diferencias entre dos de los representantes más importantes del Partido de La U, la bancada parlamentaria de esta colectividad se reunirá el martes de la próxima semana con Uribe, e iniciarán un camino de intermediación para encontrar la “convergencia ideológica”.
“A Twitter necio, oídos sordos” fue la respuesta del ministro Restrepo, quien supuestamente es uno de los causantes de la ruptura Santos-Uribe. Pero la pelea no es nueva, las diferencias entre Uribe y Restrepo vienen de años atrás, cuando el último era uno de los principales críticos de varias de las políticas de Uribe, incluida la de Agro Ingreso Seguro (AIS).