El exseleccionador de fútbol de Brasil Dunga podría reemplazar a Luiz Felipe Scolari en el banquillo de la Seleçao, según reportaron el sábado algunos medios de prensa, pese a que el ex DT del popular Corinthians, Tite, es considerado como el favorito al cargo.
La Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) confirmó que dará a conocer al sucesor de Felipao este martes a las 11H00 locales (14H00 GMT) en Rio de Janeiro, y según un buen número de diarios brasileños, Dunga, de 50 años, podría regresar.
Hasta este sábado el favorito era Adenor Leonardo Bacchi, conocido como Tite, aquel que llevó al 'Timao' a ganar la Copa Libertadores 2012 y el Mundial de Clubes nada menos que contra el Chelsea, ese mismo año.
El último jueves, la CBF designó como coordinador técnico de la selección a Gilmar Rinaldi, quien reemplazará a Carlos Alberto Parreira, aquel entrenador que llevó a Brasil a ser campeón en 1994.
Gilmar fue el tercer arquero de la selección brasileña que se llevó la Copa del Mundo ese año, bajo la capitanía precisamente de Dunga.
El saliente presidente de la CBF, José María Marín, quien dejará su cargo el próximo año a Marco Polo Del Nero, dijo que la CBF pensará un poco antes de la decisión final sobre el nuevo entrenador.
Dunga, quien reemplazó a Parreira después de que Brasil cayera en cuartos de final del Mundial Alemania-2006, llevó a la 'verdeamarela' a vencer en la Copa América 2007 y luego ganar la Copa Confederaciones 2009.
No obstante, el exmediocampista del Fiorentina fue relevado del cargo luego de que Brasil cayera, también en cuartos de final, ante Holanda en el Mundial Sudáfrica-2010.
Según el diario O Dia de Rio de Janeiro, Dunga "está muy cerca de volver", destacando la muy buena relación que tiene con Gilmar.
El diario Globo dijo, por su parte, que Gilmar y Dunga habían logrado rápidamente un acuerdo con la CBF, cortando así la posibilidad que se siga adelante con la opción de Tite.
Según el diario Extra, Dunga contó a sus amigos que ve el retorno a la selección de Brasil como un saldo de cuentas, porque nunca se conformó con la manera en que Brasil fue eliminada de Sudáfrica bajo su dirección técnica.