La industria aeronáutica castrense local avanza tanto en el campo de los aviones no tripulados como en la construcción de aeronaves y partes. Igual ocurre con los astilleros de la Armada.
Al decir de los analistas, y de la propia guerrilla, uno de los elementos que más contribuyó a inclinar la balanza del conflicto armado interno a favor del Estado fue la modernización y eficiencia de la aviación castrense y policial.
Sin duda alguna la capacidad de combate de aviones y helicópteros de la Fuerza Pública, su apoyo en materia de movilidad de tropas, respaldo al personal en tierra y capacidad de reacción, han dado como fruto no sólo una mayor efectividad en la neutralización de la guerrilla, sino que ha sido mediante bombardeos y desembarcos en zonas difíciles que se han asestado los más fuertes a las Farc, como los abatimientos de los integrantes del ‘Secretariado’ subversivo Alfonso Cano, Mono Jojoy o Raúl Reyes.
Y pese a que está arrancando un nuevo proceso de paz con las Farc, la orden a la Fuerza Pública no es otra que: arreciar, arreciar y arreciar la ofensiva contra la guerrilla y otros grupos armados ilegales.
Por ello, el fortalecimiento del recurso humano, técnico y tecnológico de la Fuerza Pública no se detiene, tanto para el Ejército como la Armada Nacional y, en especial, la Fuerza Aérea.
De allí que, en materia de poder desde el aire, se venga trabajando en la senda del desarrollo tecnológico para desarrollar sensores propios, radares y aviones no tripulados (más conocidos como drones).
La viceministra de Defensa para el Grupo Social y Empresarial de la Defensa (Gsed) y Bienestar, Yaneth Giha Tovar, y el comandante de la FAC, general Tito Saúl Pinilla, explican en qué consiste este nuevo plan.
Los drones
Según la alta funcionaria desde hace más de un año Colombia viene trabajando en la fabricación de su propio avión no tripulado que permitirá ejecutar misiones tácticas, de Inteligencia militar y de vigilancia, no solo de las fronteras y las doscientas millas de la zona económica exclusiva en el mar territorial, sino en el interior del país.
Los aviones, explicó la viceministra, cuentan con sistemas intercambiables de cámaras diurnas, nocturnas, infrarrojas o térmicas que registran fotos o videos y transmiten imágenes e información en tiempo real.
Tovar precisó que estas aeronaves no solamente tienen uso militar y estratégico, sino también son empleadas para la vigilancia de ríos, represas, montañas, nevados y volcanes, esto último en un esfuerzo para prevenir desastres naturales.
Explicó la Viceministra que los aviones no tripulados (UAV), por siglas en inglés “Unmanned Aerial Vehicle”, o sistema aéreo no tripulado (USA), “Unmanned Aerial System”, son operados en Colombia por la Fuerza Aérea desde hace varios años por su capacidad en aplicaciones militares y civiles.
Actualmente en el mercado existe una amplia variedad de formas, tamaños, configuraciones y características en el diseño de los UAV o drones. Los aparatos vuelan de forma autónoma sobre la base de planes de vuelo pre-programados, usando sistemas más complejos de automatización dinámica.
Los drones militares no solamente realizan misiones de reconocimiento e Inteligencia, sino que ahora registran un creciente número de aplicaciones civiles, como en labores de lucha contra incendios o seguridad civil, vigilancia de oleoductos, infraestructura eléctrica y vial, así como en temas sociales.
Actualmente hay aparatos que tienen una envergadura de 26 metros, 4,5 metros de largo y 1,84 metros de altura, pero también los hay más pequeños y versátiles que permiten desarrollar importantes misiones de seguridad nacional.
El avión no tripulado criollo viene trabajándose desde hace más de doce meses y ya está en etapa de pruebas. “Ese proyecto es importante, aunque todavía esta en prueba, pero esperamos que podamos tener una buena noticia para el país en próximos meses”, dijo Giha Tovar.
Por ahora, dijo la Viceministra, se está analizando con quién se va aliar Colombia. “… Aún no hemos tomado la decisión, pero por supuesto que vamos a trabajar con un aliado extranjero. Obviamente estos países ya han caminado mucho en estos temas y nosotros queremos aprovechar ese camino que ya han recorrido”, dijo.
Más avances
“Nosotros en Colombia hemos decidido empezar a trabajar en la senda del desarrollo tecnológico en forma y en grande, como lo hicieron países como Corea e Israel. En ese sentido tenemos un programa que ya estructuramos, un programa que intenta desarrollar tecnologías de sensores, de radares y de aviones no tripulados”, sostuvo la Viceministra.
En cuanto a la Corporación de la Industria Aeronáutica Colombiana (Ciac), Giha Tovar destacó el buen momento de una entidad que se dedica a la reparación y mantenimiento de aeronaves para la FAC y la producción de aviones militares. Entre sus productos se destacan el T-90 Calima, primer avión militar fabricado en Colombia, y ciertos componentes para el Embraer KC-390. Además fabrica un avión de entrenamiento y en sus planes está alcanzar una cifra de 25 aeronaves.
“Colombia continúa confirmando el posicionamiento en materia tecnología, pues son tecnologías que el mundo entero está mirando. El Ejército ha hecho esfuerzos maravillosos en materia de comunicaciones y la FAC desarrolló el casco del Arpía, nuestro helicóptero Black Hack o Halcón Negro, con el que hacemos operaciones muy sofisticadas. Antes ese casco se importaba y ahora lo desarrollamos en Colombia”.
Aseguró la alta funcionaria que una empresa nacional, Antares, desarrolló un paracaídas de frenado para los aviones Kfir. Antes ese elemento debía ser importado.
Los radares
Colombia también quiere desarrollar su propio radar. “… Eso lo queremos hacer en conjunto con la gobernación del Meta y la alcaldía de Villavicencio. Es un proyecto en el que estamos trabajando con el apoyo de Corea. Aquí lo que estamos haciendo es ganar el conocimiento de otros países y por supuesto que tenemos todo el apoyo de los coreanos. Obviamente con la FAC se coordinará la instalación del radar”, dijo.
Afirmó que “lo más importante es que ese esfuerzo no termina ahí. Este trabajo lo empezamos en forma una vez tengamos los recursos aprobados a nivel nacional. Vamos a trabajar con Colciencias y en la región del Meta para poder sacar adelante el radar. En Colombia tenemos la posibilidad de fabricar un radar para el año 2015”.
“… Los radares y los aviones no tripulados usan la tecnología de los sensores. Es básicamente lo que nos permite ver, en términos muy simples y sencillos, desde altas distancias, para vigilar los oleoductos… Estamos trabajando incluso con Ecopetrol porque queremos que esta tecnología sea empleada por las grandes empresas civiles”.
Reiteró que se está trabajando en varias iniciativas, “pero por ahora tenemos estos proyectos concretos. Estamos esperando a que se definan los recursos de las regalías en Ciencia y Tecnología y empezamos a trabajar en forma en estos proyectos y tenemos la intención de trabajar con otros departamentos que tengan interés en estos temas”.
Acotó que “los proyectos de los sensores y del radar son a largo plazo. Es decir, a cuatro años y estamos hablando de veinte mil millones de pesos. Son proyectos que generarán empleo para muchos ingenieros, incluso de la región. Es un tema muy importante. El Meta podrá cambiar su vocación a través de este tipo de proyectos”.
Astilleros
La Viceministra insistió en la necesidad de marchar por los senderos del progreso y desarrollo no solo y exclusivamente para la industria militar, sino para el país por sus aplicaciones civiles. Destacó el trabajo en materia de ciencia y tecnología a las empresas Cotecmar y de la Ciac.
Explicó que Cotecmar es líder de la Industria Naval en Colombia, emprendiendo programas de investigación y desarrollo, creando un vínculo entre la academia y la industria astillera del país, logrando el apoyo de Colciencias y empresas particulares que han creído en este ambicioso megaproyecto, consolidando día a día su posición de liderazgo y ganando terreno en el mercado internacional.
La entidad fortaleció su presencia en el mercado internacional, atendiendo embarcaciones particulares de países como Estados Unidos, Jamaica, Japón, Honduras, Noruega, Panamá, México, Rusia, Alemania y Antillas Holandesas, entre otras naciones.
La Viceministra recordó que Brasil le comprará a la industria militar colombiana cuatro patrulleras fluviales para reforzar la vigilancia en el río Amazonas.
SE INICIARÁN VUELOS DE PRUEBA
Los drones son muy útiles: FAC
Según el comandante de la FAC, general Tito Saúl Pinilla, Colombia cuenta con aviones no tripulados o drones desde hace varios años “con excelentes resultados en operaciones militares y de Inteligencia, pero también con amplios beneficios para el país en materia de vigilancia para prevenir desastres naturales”.
“Hemos aumentado nuestra flota a un mayor número de aviones no tripulados, con mayores capacidades, y esto nos hizo crear un simulador que permite entrenar la gente en este nuevo trabajo”.
Aseguró que la fabricación o producción del avión no tripulado en Colombia obedece a un “convenio, digamos, civil y militar”.
Explicó el alto oficial que el avión criollo está desarrollado y las primeras pruebas en tierra ejecutadas. “Es una aeronave con muy buenas características, diseñado totalmente en Colombia… Iniciamos los vuelos de prueba en el curso de próximos días, debido a que hemos tenido algunos inconvenientes con una parte de tecnología. Pero con empresas extranjeras podremos desarrollar en muy corto plazo nuestro primer avión no tripulado, primero para utilizarlo en el país y, segundo, para poder expandir esta tecnología a las diferentes naciones de la región”.
Insistió el comandante de la FAC que a pesar de las difíciles condiciones climáticas y geográficas en el país, se pueden emplear los drones porque “hay aviones de diferentes características y alcances. Hay aeronaves que por su característica y alcance solamente pueden ser usadas en determinadas regiones. Vamos a poner un ejemplo, en la zona de La Macarena, en el Meta, que es una región plana, las aeronaves llegan hasta cierta altura y solamente van hasta cierta distancia. Pero, puedo decir, que hemos adquirido tecnología y ahora pueden volar hasta mil millas sin tripulación. De modo que podríamos vigilar nuestras islas y en general nuestro territorio marítimo hasta 200 millas mar adentro. Así que podemos hacerlo”.
El general Pinilla no respondió la pregunta sobre si los drones pueden ser habilitados con armas, como los hay en los Estados Unidos y en Israel. “No puedo hablar sobre este tema, pero puedo afirmar que contaremos con la mejor tecnología”, dijo.
“Los costos de estos aviones son mucho más bajos de los que invertimos en la compra de los equipos al exterior. Así que nuestro proyecto a futuro nos va a permitir tener nuestros propios aviones con muy buen alcance, con muy buena tecnología y a menores costos. Obviamente por ser un diseño, inicialmente tiene un costo alto, pero a futuro podremos tener una flota mucho más grande y confiable”.
Aseguró que gracias al desarrollo de la FAC las trazas de los aviones del narcotráfico, contrabando de armas y de otras actividades criminales prácticamente desaparecieron en Colombia.
“En el 2000, más o menos en el espacio aéreo nacional podían volar, si la mente no me falla, cerca de doscientos aviones sin ningún control, transportando no solamente narcóticos sino armas, de precursores químicos... Pero hoy, con un proyecto y un proceso que se llamó ABD -obviamente aquí hay que involucrar al gobierno de Estados Unidos que en su comienzo nos apoyó-, disminuyó hasta en un 98 o 99 por ciento esa actividad al margen de la ley ”, precisó el general.
Sobre ese porcentaje pendiente “… tenemos la confianza y la seguridad de lograrlo cubrir en el corto plazo, porque en nuestro plan de desarrollo también está la adquisición de radares. Es decir, radares móviles que nos permitan suplir la situación del Cerro Santana, por ejemplo, que el año pasado fue dañado. La FAC tendrá la capacidad en 24 horas de reemplazar ese radar e instalar uno militar móvil que cumpla esas funciones de seguridad con la aviación civil también”.