Dólar a 3.500 pesos ya no es un espejismo | El Nuevo Siglo
Domingo, 14 de Febrero de 2016

La cotización  del dólar a 3.500 pesos, que antes parecía un simple espejismo para los colombianos, comenzó a tomar cuerpo ante la arremetida de los últimos días en que la divisa pasó de largo la barrera de los 3.400 pesos y ahora tiene en la mira el próximo escalón que marcaría récord en el mercado cambiario nacional.

 

Sin embargo, las consecuencias de un dólar a 3.500 pesos van a afectar sin duda el comportamiento de la economía y con ello los ciudadanos de a pie sentirán el impacto en sus bolsillos.

 

Ya con una devaluación bordeando el 26 por ciento, hoy los colombianos sienten que todo lo que hacen tiene que ver con el dólar.

 

1)    El costo de vida

Desde el punto de vista de la microeconomía, los ciudadanos reciben el impacto: el pan está más caro porque los panaderos dicen que el valor de la materia prima se disparó; los lecheros están aguantando, pero no demoran en subirle a ese producto. En los derivados del agro, la papa, la arveja, las hortalizas, las frutas suben cada día su valor, ante la impotencia de la gente. Es decir, la canasta se disparó y los ciudadanos son conscientes que el bolsillo ya no aguanta más incrementos. Otro elemento es que los bienes importados se encarecen, como las neveras, televisores, celulares, entre otros. Con una inflación anual de 7,45 por ciento en enero de este año, los efectos del fenómeno de El Niño, el traspaso de depreciación del peso hacia los precios y el efecto de los mecanismos de indexación de precios y salarios mantendría alta la inflación en la primera mitad del año.

 

2)    Uso de las tarjetas

El incremento de la tasa de cambio también se está trasladando al crédito, sobre todo a las compras con tarjetas.  Por ejemplo, una persona con tarjeta American Express que haga hoy la compra de sus tiquetes a Estados Unidos, cuyo precio es de US$1.000 en promedio, podría pagar mucho o salir ganando dependiendo del dólar en el futuro. Si la divisa sube hasta los $3.500, estos consumidores verán sus créditos encarecerse en 9,3%, es decir, pagarán US$93 más de lo previsto. Los expertos recomiendan a los ciudadanos no endeudarse en dólares y abstenerse de comprar con este tipo de tarjetas. “Asegurar que una compra que hice hoy se va a mantener en doce meses con ese valor tan volátil es muy difícil, entonces, nunca se va a tener una claridad de cuánto se va a pagar por ese bien”, afirma el analista Camilo Silva.

 

3)    Déficit comercial

El déficit comercial en diciembre habría anotado US$1.506 millones, recuperándose levemente frente al nivel observado en noviembre de 2015 de más de US$1.600 millones. Esto se explica por una disminución marcada en la tasa de crecimiento de las importaciones en términos anuales que habrían caído 25,37% a US$4.906 millones. Aunque en diciembre las exportaciones colombianas continuaron con su tendencia de contracción, las importaciones estarían empezando a decaer en línea con la devaluación más marcada, es decir con el dólar caro. En diciembre de 2015 las exportaciones de Colombia disminuyeron 32,5% frente al mismo mes de 2014. De esta forma, sumaron US$2.543 millones y en todo 2015 US$35.691 millones, lo que representa una caída de 34,9% frente al nivel de todo 2014. Con la lectura de noviembre el pronóstico (-US$15.753 millones) luce relativamente alto. Para 2016 se espera un balance comercial de –US$15,204 millones.

 

4)    Venta de petróleo

Uno de los rubros que podría aprovechar el alto precio del dólar, sería el de la venta de crudo. Pero eso no lo puede aprovechar el país, ya que prácticamente está produciendo a pérdida durante en los últimos meses. Durante 2015 las exportaciones de petróleo cayeron 50,8% anual, completando 19 meses consecutivos de caída y perdiendo participación dentro de las exportaciones totales, desde un 59,3% en marzo de 2014 hasta 30,3% del total en el cierre del año pasado. En este sentido, es interesante mencionar que el volumen de las exportaciones de petróleo disminuyó 7,5% al cierre de 2015, lo que sugiere que este renglón estuvo impactado negativamente en mayor medida por los precios que por el volumen. Al igual que el año anterior, con un descenso de 42% en el valor exportado el petróleo será el producto más afectado, seguido por el carbón (-22%) y el níquel (-15%).

 

5)    Déficit de cuenta corriente

Vale la pena mencionar que si el dólar sigue subiendo y supera los 3.500 pesos, el déficit en cuenta corriente acumulado del año 2015 sería superior a los US$16.183 millones, considerablemente más alto al de 2014 cuando el déficit comercial total fue US$6.243 millones. Para todo 2015 se estima un déficit en la cuenta corriente entre 6,3% y 6,7% del PIB. Parte del detrimento en este indicador se debe a la reducción del PIB en dólares por el efecto de la depreciación del peso frente al dólar. Para este año se espera un déficit externo entre 5,4% y 6,5% del PIB, el cual supone en el escenario central que continúa el deterioro de las exportaciones y el ajuste de las importaciones, en un entorno en el que el financiamiento externo sería menor que el observado en años anteriores y posiblemente más costoso.

 

6)    Tasas de interés

Con el dólar caro, afectando la inflación, las presiones para un nuevo incremento en la tasa de interés por parte de Banco de la República continúan vigentes. En primer lugar, la inflación de enero ascendió de forma acelerada y podría traducirse en un alza en las expectativas como ya sucedió en las expectativas descontadas por el mercado de deuda pública. En este escenario, los analistas de CorpBanca consideran que se dará un aumento de 25 puntos básicos en la tasa de intervención hasta el 6,25%, buscando también contener el gasto, y de esta manera reducir la presión sobre el déficit en cuenta corriente. Esta decisión nuevamente se alcanzaría por mayoría dentro de los miembros de Junta en la medida que habrá quienes aboguen por un ajuste de 50 puntos, como lo expresaron en encuentros previos.

 

7)    Deuda externa

El alto precio del dólar hizo que el endeudamiento total del país subiera a US$110.423 millones. El sector público debe US$66.438 millones, mientras el privado, US$43.985 millones. Con relación al Producto Interno Bruto, la deuda subió 8,9 puntos porcentuales en octubre frente al mismo mes de 2014. La deuda externa equivale al 37,5 % del producto interno bruto (PIB) del país. El porcentaje total de deuda externa en relación al PIB subió 8,9 puntos porcentuales con respecto al mismo mes de 2014, cuando el endeudamiento de los sectores público y privado alcanzó el 26,6 %. Según el Emisor, la deuda del sector público alcanzó a octubre los 66.438 millones de dólares, mientras el endeudamiento privado llegó a 43.985 millones de dólares.

 

8)    Industria

La producción industrial se expandió noviembre por encima de las expectativas. La producción industrial evidenció un crecimiento anual del 4,8% en noviembre de 2015. El repunte de la actividad manufacturera se dio principalmente por la dinámica del sector de coquización, refinación de petróleo y mezcla de combustibles. Lo anterior es explicado por la entrada en operación de Reficar. Las ventas del sector crecieron 4,3% interanual. Expectativa: Prevemos un decrecimiento industrial de 0,6% para 2015 y para este año una recuperación sustancial dado el efecto de la depreciación del peso sobre las ventas externas y por la entrada en operación de la Refinería de Cartagena. Asimismo, el índice de confianza industrial de Fedesarrollo al cierre de 2015 fue 1,3%, superior en 3,4 pps al registro del 2014. Esto representa una corrección de la tendencia presentada en los meses anteriores.

 

9)    Comercio

A pesar de los bajos niveles en ventas, la confianza comercial mejoró. En noviembre se presentó una variación anual de 0,3% en las ventas de comercio al por menor. Al excluir el componente de combustibles y vehículos, el comercio creció 4,9% respecto a noviembre de 2014. La venta de vehículos fue el único sector que se contrajo de manera importante. Esto es explicado por el aumento de precios como resultado de la depreciación cambiaria, las mayores tasas de financiamiento y la reducción de la intención de compra de bienes durables. A pesar de la pérdida de tracción de las ventas la contratación continúa creciendo. Se espera que ante la reducción de la confianza del consumidor, la baja disposición a comprar bienes durables y los efectos de la depreciación cambiaria, las ventas del comercio se desaceleren hasta 2,9% en 2016.

 

10)                      Inversión extranjera

Los flujos de inversión del exterior experimentaron reducciones adicionales.  En diciembre la inversión extranjera directa (IED) en Colombia totalizó US$962 millones. Así mismo, la inversión extranjera en portafolio (IEP) llegó US$416 millones. En el caso de la IED, el total representa un 3,6% menos que las percibidas en el mismo periodo de 2014. Por su parte, la IEP se redujo 60,9% interanual. En el acumulado 12 meses hasta noviembre, se ha registrado una variación interanual de -27% en IED y de -56,1% en IEP. • Estas fuertes reducciones han sido resultado del deterioro de las condiciones financieras globales, el menor apetito por activos emergentes y el descenso en la rentabilidad esperada de los activos y los proyectos de inversión en Colombia.

 

11)                      Devaluación

Con niveles de devaluación anual de casi el 40 por ciento, como sucedió el año pasado, el efecto combinado del traspaso de la devaluación del tipo de cambio, el endurecimiento del fenómeno climático que activan mecanismos de segunda ronda, afectarán el nivel de precios en este primer trimestre. La inflación en el arranque de este año seguirá siendo impactada por choques transitorios.  Además, la perspectiva de los analistas consideran la posibilidad de que el fenómeno de El Niño se mantenga en el primer semestre y que se debilite en los últimos meses del año. A ello se sumaría un traspaso de la depreciación cambiaria a los precios finales a un menor ritmo que el observado recientemente.

 

12)                      Las calificaciones

Otro hecho que puede provocar el incremento en el precio del dólar, es que las firmas calificadoras de la deuda soberana del país, corrijan sus notas a la baja. En medio de una tendencia generalizada de incremento en estas primas, el spread EMBIG de Colombia se encuentra por encima del promedio de países con calificación de riesgo soberano equivalente. En consecuencia, el aumento de la percepción de riesgo de Colombia responde a los grandes retos económicos, especialmente las presiones fiscales y el desbalance externo. Pero la forma en la que las autoridades gestionen adecuadamente estos desafíos será determinante para las decisiones que puedan tomar las agencias en los próximos meses en relación con la calificación soberana o su perspectiva.

 

13)                       Endeudamiento de las empresas

Con el dólar disparado, está creciendo el endeudamiento de las empresas. Prueba de ello son las que cotizan en la bolsa de valores. Excluyendo el sector petrolero, cuya deuda neta se ha quintuplicado en los últimos tres años, otros sectores se han endeudado por la fuerte expansión internacional con operaciones clave: Éxito compró GPA en Brasil y Libertad en Argentina, por US$1,8 billones; Nutresa, adquirió TMLUC y Grupo El Corral por más de US$1 billón; Cementos Argos adquisición los activos de Vulcan Materials en EE.UU. y los de Lafarge en Honduras por más de US$1,1 billones, y Celsia adquirió los activos de GDF Suez en Panamá y Costa Rica por US$840.000 millones, entre otros. Pero las empresas que no tienen cobertura de su deuda denominada en dólares sufrirán más, teniendo en cuenta que la tasa de cambio en Colombia debe mantenerse por encima de los $3.100 durante el año