El serbio Novak Djokovic, doble campeón vigente de la prueba, se clasificó este jueves para su cuarta final en el Abierto de Australia de tenis, al derrotar con contundencia al español David Ferrer en tres sets, por 6-2, 6-2 y 6-1, este jueves en Melbourne.
El número 1 mundial se mostró intratable ante el español, número cuatro del circuito, y se enfrentará el domingo en la final al ganador de la segunda semifinal, que enfrentará el viernes al suizo Roger Federer y al escocés Andy Murray.
Djokovic ha ganado hasta ahora las tres finales que alcanzó en Australia (2008, 2011 y 2012) y se convertiría en el primer jugador, desde la era Open, que lograría imponerse tres veces consecutivas en el primer Grand Slam del año.
Ante la superioridad de Djokovic este jueves, David Ferrer, que superará en la clasificación de la ATP a su compatriota Rafa Nadal (ausente en Australia por lesión), nada pudo hacer, no por su culpa, sino porque el serbio se sacó de la chistera uno de esos partidos que le han convertido en el mejor jugador del circuito.
Djokovic, que alcanzó su undécima final consecutiva en un Grand Slam, pareció totalmente recuperado de su maratoniano partido de más de cinco horas de octavos de final, ante el suizo Stanislas Wawrinka, al que venció el lunes pasado en cinco sets.
"Creo que no puedo jugar mejor que esto. He jugado un tenis increíble. Estaba muy cómodo y con confianza desde el principio. Definitivamente, es uno de mis mejores partidos de mi carrera" dijo el serbio nada más derrotar a su rival.
Imposible de desbordarle en defensa, agresivo en ataque, Djokovic rozó el partido perfecto, marcando más del doble de puntos que su adversario (85 a 41), una estadística alucinante a este nivel.
Otra muestra de su dominio: solo perdió siete puntos con su servicio y, al mismo tiempo, rompió siete veces el saque a Ferrer, quien no dispuso de una sola ocasión para hacer el break.
El español, de 30 años, no pudo clasificarse para su primera final de un Grand Slam, al haber caído en su quinta semifinal. Solo el británico Tim Henman, que perdió seis semifinales en Grand Slams, presenta una estadística peor que Ferrer desde el inicio de la era Open.
"Nunca perdí de esta manera. He tenido cero opciones de ganar. No hay nada que decir. Él ha sido mejor y punto", se limitó a decir el jugador alicantino.