Para el presidente de la Comisión Primera del Senado, Juan Manuel Galán, indicó que el representante por Bogotá, Simón Gaviria, ratificado el fin de semana como director nacional del Partido Liberal, llegó presionado a la Convención para darle poder al ala que quiere que el liberalismo vuelva al pasado: “No podía hacer otra cosa. Quienes tenían el poder y control en delegados eran quienes defendían el pasado liberalismo”, refiriéndose en particular a quienes impulsaron que el exministro Horacio Serpa fuera cabeza de la lista al Senado.
“Estábamos preparados para lo que vimos y oímos”, expresó el senador Galán, quien dijo que ahora dará la lucha para que las viejas mañas del liberalismo no se tomen la colectividad, asegurando que el 9 de marzo los votantes podrán elegir entre los que quieren llevar al partido a las “viejas prácticas” y al “pasado” o “a los que quieren jugársela por la transformación”.
Para Gaviria, el Partido Liberal “no solo se puede limitar” a Serpa y Galán, pues “hay más tendencias y más protagonistas”.
Tras indicar que Serpa fue aclamado cabeza de lista en la Convención y no antes, anotó que “contaba con un fuerte respaldo”.
“No hubo chantaje de ninguna naturaleza”, declaró Gaviria ante lo dicho por Galán.
De otra parte, Gaviria sostuvo el domingo en la Convención, que “les mando un mensaje a aquellas personas que le apuestan al fracaso del proceso de paz, a los que se opusieron a la ley de víctimas y ahora recogen esas banderas para oponerse a la paz, a los factores de poder que se lucran del conflicto, a los que por razones políticas quieren ponerle zancadilla al proceso, aquellos que le apuestan a que el liberalismo sea pasivo… A todos aquellos les digo desde acá como dice mi amigo Horacio Serpa: mamola, mamola, mamola”.