Delegaciones de Irán y de la Unión Europea se reúnen el jueves y el viernes en Ginebra para finalizar el acuerdo interino sobre el programa nuclear iraní, en particular la cuestión de las centrifugadoras de última generación.
Antes del inicio de las negociaciones, el presidente ruso Vladimir Putin y su homólogo iraní Hasan Rohani conversaron por teléfono sobre la aplicación del acuerdo, anunció este jueves un comunicado del Kremlin.
Putin y Rohani conversaron "sobre los problemas internacionales actuales, incluido la situación en Siria y el contexto de los preparativos de la conferencia Ginebra 2", dijo el comunicado.
La primera reunión de esta ronda de negociaciones está prevista el jueves por la tarde, indicó una fuente de la Unión Europea.
Las negociaciones se llevan a cabo en medio de una gran discreción. El lugar de la reunión, la identidad de los participantes y el programa de discusiones no se han dado a conocer.
Sin embargo, el departamento de Estado norteamericano confirmó la presencia este jueves en Ginebra de su número tres, la subsecretaria de Estado para Asuntos Políticos, Wendy Sherman.
Por su parte Irán anunció que Abas Araghchi, jefe de los negociadores iraníes y viceministro de Relaciones Exteriores, tiene previsto entrevistarse con la diplomática europea Helga Schmid el jueves y el viernes en Ginebra.
Helga Schmid ocupa el cargo de adjunta de la jefa de la diplomacia de la Unión Europea, Catherine Ashton, que tiene a su cargo las negociaciones en nombre del grupo 5+1.
Los expertos de Irán y del grupo 5+1 (los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU, Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Rusia y China, más Alemania) intentan definir desde hace dos meses las modalidades que permitan ejecutar el acuerdo alcanzado en Ginebra el 24 de noviembre.
Dicho acuerdo prevé, entre otras cosas, que no haya nuevas sanciones contra Irán durante un periodo de seis meses en el que Teherán también se ha comprometido a congelar el desarrollo de su programa nuclear.
El punto más delicado de las conversaciones del jueves tiene que ver con las centrifugadoras más modernas de Irán, capaces de enriquecer rápidamente el uranio hasta un nivel militar.
Es "un punto sobre el cual hay que tomar una decisión" y "que está siendo muy discutido", dijo a la AFP una fuente diplomática en Viena.
El acuerdo del 24 de noviembre pasado no detalló ese punto, lo que permite que cada parte lo interprete a su gusto, dijo la fuente diplomática.
"Hay que encontrar algo equilibrado. Es un tema importante que puede llegar a ser un punto de bloqueo", agregó la fuente.
Las centrifugadoras IR-4, IR-6 e IR-5 son aparatos de tercera y cuarta generación que Irán está probando.