El secretario de Estado norteamericano, John Kerry, prometió en la inauguración de una reunión en el departamento de Estado con representantes de la ONU y ONGs conversaciones "profundas" sobre los problemas vinculados a la ayuda humanitaria a Siria.
"Queremos tener conversaciones serias y profundas para encontrar los medios para respetar nuestras obligaciones para con los hombres y mujeres que enfrentan grandes peligros", declaró Kerry al comienzo de este encuentro, del que participan Antonio Guterres, alto comisario de la ONU para los refugiados, así como los dirigentes del Programa Alimentario Mundial, de la Unicef y de la Cruz Roja Internacional.
"Tenemos grandes dificultades para acceder a la gente, para desplazarla y protegerla", reconoció Kerry, quien la semana pasada estuvo en el campo de refugiados de Zaatari, en el norte de Jordania, donde viven 115.000 refugiados sirios.
Sin un final a la vista, el conflicto sirio, iniciado en marzo de 2011, ya ha dejado alrededor de 100.000 muertos y 1,8 millón de refugiados en países vecinos.
Estados Unidos ya prometió 815 millones de dólares en ayuda para los programas gestionados por la ONU destinados a los refugiados sirios, pero las ONGs destacan que los pedidos de más ayuda no han dado los resultados que se logran cuando ocurren catástrofes naturales.