La disciplina al interior de los partidos es uno de los principios fundamentales para que sobrevivan, sin embargo la labor que en el país pueden hacer los comités de ética para mantenerla es poco efectiva y choca frente a jurisprudencias como la que frente a la mayor falta, la doble militancia, establece que no es causal de pérdida de investidura.

En este sentido sus decisiones se limitan a sanciones como la pérdida del derecho a voz y voto por unos pocos meses; mientras que la expulsión de la colectividad por faltas consideradas graves, poco se presenta.

Sin embargo, los partidos este año tienen la oportunidad de dar más dientes a los comités de ética fortaleciendo el código de ética y disciplinario, pues la mayoría de las colectividades tienen que adecuar sus estatutos a la Ley 1475, que reglamentó la Reforma Política de 2009.

Precisamente la Ley 1475 prohíbe la doble militancia, al señalar que “en ningún caso se permitirá a los ciudadanos pertenecer simultáneamente a más de un partido o movimiento político”.

Esta misma Ley estatutaria señala entre los mínimos que deben contener los estatutos de un partido o movimiento político, “un régimen disciplinario interno, en el que se adopten mecanismos para sancionar la doble militancia”.

Sin embargo un fallo del Consejo de Estado señala que si bien el Acto Legislativo 01 de 2003 no permite la doble militancia, aclara que el constituyente no dispuso que esta falta acarreará la pérdida de la investidura.

En el fallo el Alto Tribunal dice que la doble militancia debe ser sancionada dentro de los estatutos de los partidos, claro está, sin pérdida de investidura.

En este punto cabe la pregunta, ¿le sirve a un partido expulsar a un congresista, por ejemplo, si éste se quedará con la curul?

En la actualidad el Comité de Ética del Polo investiga por presunta doble militancia a los senadores Camilo Romero, Jorge Guevara, Mauricio Ospina y Luis Carlos Avellaneda, quienes han manifestado su intención de irse del Partido, para lo cual buscan una figura jurídica que lo permita. “La investigación disciplinaria la contesté hace unos días, contesté los cargos. Y básicamente ellos plantean un tema de doble militancia. Pero yo no estoy en doble militancia porque ellos creen que Progresistas es un partido, y Progresistas en este momento no es nada”, explicó el senador Avellaneda.

Hablan los partidos

El presidente del Partido de Integración Nacional (PIN), Ángel Moreno, consideró que no es suficiente la normatividad en materia disciplinaria para que los partidos puedan actuar.

“No nos hemos puesto de acuerdo en las políticas partidarias para el tema ético. No hay unas herramientas jurídicas que nos permitan actuar”, señaló.

En ese sentido dijo que el país debe legislar aún más sobre la organización de los partidos, “que definamos un umbral ético”.

Por su parte el secretario General del Partido Conservador, Jorge Humberto Mantilla, destacó la importancia de los comités de ética en los partidos porque “ayudan en la vigilancia y son artífices también de la regulación que tienen que tener los partidos en la militancia para que los mismos puedan actuar en cumplimiento de los altos valores del Partido”.

Aunque consideró que hoy los comités de ética tienen mecanismos para cumplir con su labor, “sería bueno que se le dieran más herramientas por parte de le ley”. 

En tanto que el secretario General del Partido Social de Unidad Nacional (La U), Juan Camilo Restrepo, dijo que la colectividad tiene dos órganos de control: uno, el Comité de Ética Disciplinario, y el Veedor.

Añadió que “la Ley 1475 obliga que los estatutos, que es la máxima norma que puede regir un partido, los consagre. El Partido de La U tiene en sus estatutos ya código de ética disciplinario, en donde se fijan unos procedimientos, un debido proceso a la hora de investigar o imponer sanciones a sus militantes”.

Por su parte el presidente de la Alianza Social Independiente (ASI), Alonso Tobón, dijo que la colectividad ya reformó el código de ética para ponerse a tono con la Ley 1475, “con unos instrumentos ágiles, con unos organismos competentes para que por la vía de la política y la disciplina partidaria construir partido, que es lo que estamos haciendo”.