El presidente de Bolivia, Evo Morales, anunció en La Paz que su país presentará este mes una demanda contra Chile ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya para lograr una salida al mar.
"Este mes el equipo (jurídico) se va a trasladar hacia La Haya, a la cabeza del canciller David Choquehuanca, acompañado por nuestro delegado o agente en La Haya, Eduardo Rodríguez, junto al equipo (...). Es decir, todo (está) preparado", reveló el mandatario.
"La tarea (del equipo jurídico) es lograr una salida al mar con soberanía", explicó el gobernante en una reunión con a empresarios bolivianos en la sede del gobierno, que manifestaron su apoyo a la decisión de Morales de llevar a Chile ante la CIJ.
Además, el presidente de la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia, Daniel Sánchez, trasladó el "apoyo incondicional" de su gremio a la política gubernamental con Chile y su respaldo por trasladar el comercio exterior boliviano de los puertos chilenos de Arica e Iquique hacia los peruanos de Ilo y Matarani.
El expresidente Eduardo Rodríguez Veltzé, designado la semana pasada como embajador extraordinario y agente de Bolivia ante el tribunal de La Haya por la demanda contra Chile, ratificó este martes: la demanda "la vamos a hacer efectiva relativamente pronto".
Al contrario de lo que piensa Chile, "vivimos en un tiempo más complejo que exige un tratamiento más civilizado a través de la resolución pacífica que abre el orden internacional", planteó el exmandatario.
Bolivia perdió toda su costa pacífica de 400 km y 120.000 km2 de territorio en una guerra frente a Chile en 1879, y desde entonces reclama una salida soberana al mar que Santiago rechaza, afirmando que ambos países firmaron en 1904 el Tratado de Paz y Amistad que definió los límites fronterizos bilaterales.
En los últimos meses, las relaciones bilaterales han sido tirantes, luego de que Morales llevara su reclamo a foros internacionales como la Organización de Estados Americanos (OEA), la Celac (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños) y la ONU.
La tensión llegó a su punto más alto entre enero y febrero, por la detención de tres soldados bolivianos en territorio chileno que no se percataron de haber cruzado la frontera, cuando perseguían a contrabandistas. Tras días de complicada relación, Chile liberó a los tres militares, quienes fueron recibidos en Bolivia como héroes.
Chile ha reiterado en las últimas semanas que defenderá su soberanía ante cualquier instancia jurídica.