El despertar en la aventura hacia, generalmente ‘el sueño americano’, no es el esperado por los migrantes ilegales porque su paso por Colombia se convierte en pesadilla y terminan deportados.
El país se convirtió en paso obligado para quienes pretenden llegar de forma ilícita a Estados Unidos, Centroamérica y Europa, como lo confirman las estadísticas de las autoridades nacionales y según las cuales cada 24 horas son sorprendidos dos ilegales en el territorio nacional, 73 al mes y 872 al año.
Migración Colombia, la Policía, la Armada Nacional y el CTI registran que desde el 1º de enero de 2012 a la fecha, fueron retenidos y deportados tras cumplir con los términos de ley 3.585 migrantes ilegales en diferentes regiones, cuando se dirigían por diferentes medios de transporte hacia la frontera con Panamá.
Los ilegales son víctimas de los llamados coyotes e integrantes de redes criminales especializadas en el tráfico de migrantes y son “reclutados” en Suramérica, Centroamérica, África y Asia, con anuncios de una vida mejor y en muchos casos salir de la pobreza con trabajos bien remunerados.
“Todos los migrantes ilegales corren riesgos en busca de una vida mejor con el llamado ‘sueño americano’ o ‘europeo’, cuando no pueden emigrar por las vías legales, entonces se exponen a redes criminales que se aprovechan de su vulnerabilidad”, dijo un investigador de la Armada Nacional.
También la Policía señaló que “hombres, mujeres y niños objeto de tráfico ilícito son vulnerables a muchos fenómenos de violencia e incluso en la aventura por llegar a Estados Unidos o Europa pueden perder la vida asfixiados en el interior de los contenedores, perecer durante extenuantes jornadas en el desierto o ahogarse en el mar, en momentos en que hacen tránsito hacia sus destinos de la mano de contrabandistas que no los ven como seres humanos sino como mercancías”.
En el panorama internacional, las autoridades aseguran que el tráfico ilícito de migrantes arroja multimillonarios dividendos en dólares a las redes criminales que utilizan las rutas de África Oriental, Septentrional y Occidental hacia Europa y de América del Sur hacia América del Norte.
“Muchos de los migrantes ilegales ingresan a los Estados Unidos a través de México ocultos en camiones que pasan la frontera, mientras que otros lo hacen a pie, burlando los exigentes controles de las autoridades de fronteras, donde cuentan con sensores, helicópteros y aviones y por otros medios de transporte y, por túneles clandestinos construidos por redes dedicadas al tráfico de personas y actividades de narcotráfico”, explicó.
Uno de los investigadores precisó que la mayoría de los migrantes ilegales se identifica con documentos falsos.
Millonarias ganancias
Los coyotes ganan millonarias sumas de dinero con el tráfico ilícito de migrantes a través de fronteras e incluso entre continentes y cuyas utilidades, para algunas ONG, son similares a las obtenidas por los narcotraficantes.
“Las redes criminales cobran desde tres mil dólares hasta diez mil dólares para trasladarlos a Centroamérica, cuando van hacia los Estados Unidos”, dijo un investigador de la Policía.
El comandante de la Policía en el Aeropuerto Internacional Eldorado de Bogotá, coronel Diego Rosero, explicó que para las autoridades el tráfico ilícito de migrantes es verdaderamente una preocupación por cuanto viene en incremento.
Dijo el coronel Rosero que nada más “en las últimas horas fueron capturados dos cubanos que arribaron al terminal aéreo simulando ser colombianos, tras presentar registros civiles fraudulentos”.
“El aeropuerto Eldorado se ha convertido en puente para que ciudadanos cubanos, africanos y otros extranjeros, con documentos falsos, pretendan burlar a las autoridades y poder continuar su itinerario hacia naciones centroamericanas y México, pero con destino final en los Estados Unidos”, aseveró.
Agregó que el año pasado fueron sorprendidas 49 personas con documentos falsos y en lo corrido de 2015 otras 12. “Todos quieren utilizar a Bogotá como plataforma para poder continuar su itinerario ilegal hacia los Estados Unidos”.
Señaló el coronel Rosero que la estratégica posición de Colombia convierte al país en el principal destino de tránsito de ilegales y que deben soportar largas horas de viaje en condiciones difíciles.
El miércoles pasado fueron sorprendidos a un kilómetro de la vía que de Turbo conduce a Apartadó, 28 ciudadanos cubanos que se desplazaban a bordo de vehículos de servicio público buscando la frontera con Panamá.
Según la Policía de Urabá, los extranjeros carecían de documentos y habían contratado los servicios de siete coyotes colombianos en su afán por lograr su objetivo.
Los extranjeros quedaron a disposición de Migración Colombia para los correspondientes trámites de deportación, mientras que los siete capturados quedaron a disposición de la Fiscalía para ser procesados.
Así mismo, otros 16 inmigrantes paquistaníes que estaban ilegalmente en el país y se dirigían a Panamá, fueron sorprendidos en la terminal de Transportes de Medellín.
“Pretendían abordar un bus de transporte intermunicipal con el pretexto que se trataba de turistas y que deseaban conocer las extensas plantaciones de banano en la región agroindustrial de Urabá”, dijo un investigador de la Policía.
Sin embargo, precisó, el destino final de los paquistaníes era Turbo y de ahí desplazarse por cualquier medio a Panamá y luego continuar su recorrido por Centroamérica hasta llegar a los Estados Unidos.
En los operativos fue capturado un ciudadano venezolano quien confesó que recibió dinero para llevar desde Cali hasta Panamá a los paquistaníes.
Los extranjeros, dijo el investigador, “una vez se surtieron todos los términos de ley fueron deportados a Brasil, nación desde donde ingresaron a Colombia para buscar su destino final”.
De acuerdo con Migración Colombia, otro caso importante de retención de extranjeros se registró el pasado 18 de febrero cuando en un trabajo coordinado con efectivos de la Policía, fueron sorprendidos 37 extranjeros, quienes se movilizaban por Nariño, sin documentos legales de permanencia en el país. Habían ingresado al país por la frontera con Ecuador.
Otro caso emblemático de ilegales se registró por parte del CTI de la Fiscalía, de la Armada Nacional y Migración Colombia que dejó al descubierto una red internacional de tráfico de personas, cuyos cabecillas eran dos africanos.
La organización criminal utilizaba el Golfo de Urabá como puerto de salida de los ciudadanos extranjeros en tránsito ilegal hacia los Estados Unidos.
En principio cinco cubanos fueron sorprendidos en aguas del Golfo de Urabá a bordo de una lancha rápida que había partido de La Martina, entre los municipios de Turbo y Necoclí, con destino a Panamá.
El CTI, en desarrollo de la investigación llegó a una casa campestre cerca de Turbo, donde se encontraban nueve ciudadanos africanos que estaban esperando su turno para emprender su viaje hacia Centroamérica con destino final en los Estados Unidos.
Lo que dicen
Los servicios de inteligencia colombianos confirman que se ha establecido, con base en entrevistas rendidas por ilegales sorprendidos, que los viajeros son objeto de abusos y sus vidas en muchas veces corren peligro.
Recuerdan que “muchos viajeros ilegales han perdido sus vidas por asfixia en el interior de los contenedores; perecen en el desierto por intensas jornadas de evasión y escape para evitar ser atrapados por los guardias de fronteras de los Estados Unidos que cuentan con tecnología de punta o ahogarse en el mar en su intento de llegar a su destino final”.
La Armada Nacional reveló que desde 2010 a la fecha ha sorprendido a 544 ciudadanos extranjeros sin documentos legales, cuando pretendían llegar a México.
Entre los migrantes ilegales se encontraban 27 procedentes de Suramérica, 289 de Centroamérica, 52 de África y 176 de Asia.
Entre los extranjeros capturados y deportados por Migración Colombia se encuentran ciudadanos de Afganistán, África, Asia, Bangladesh, Bután, Camerún, Chile, Costa Rica, Cuba, Ecuador , Eritrea, Etiopía, Ezwazi, Honduras, India, Libia, México, Nepal, Nicaragua, Nigeria, Pakistán, Panamá, Perú, Sri Lanka, Somalia, Tíbet, Turquía, Venezuela, Zimbabwe, Gana y China.
Por otra parte, Migración Colombia reveló que 2.342 viajeros ilegales se identificaron con documentos falsos, mientras que los otros 1.243 suplantaron a otros ciudadanos que carecen de antecedentes.
“Los 3.585 ilegales buscan viajar burlando a las autoridades a través de las fronteras para llegar a sus destinos finales. Presentan registros civiles falsos, sellos falsos, visas y documentos falsos”, indicó Migración Colombia.
Consigna que 959 ciudadanos extranjeros sin documentos legales fueron sorprendidos en Antioquia, 247 en el Chocó, 371 en el Valle y Cauca procedentes de Nariño; 371 en Norte de Santander y en Cundinamarca 566.
En resumen, explica Migración Colombia, que por vía terrestre fueron sorprendidos 2.321 ciudadanos extranjeros sin documentos, por los aeropuertos 739 y por vía marítima 525.
Para Migración Colombia, Nariño, así como el aeropuerto Eldorado, se han convertido en paso obligado para quienes pretenden llegar de forma ilegal a Estados Unidos, Centroamérica y Europa.
De acuerdo con la información que entregan los retenidos, transitando por el territorio nacional, la travesía la iniciaron desde Asia y África hasta Brasil y una vez en esta nación continúan su desplazamiento hacia Ecuador para ingresar a Colombia.
Modus Operandi
Los llamados coyotes, a cambio de importantes sumas de dinero que van desde los tres mil a los diez mil dólares, acompañan a sus “mercancías” en el cruce de fronteras y además les prestan asesorías y les consiguen documentos falsos.
“Los delincuentes orientan a los migrantes ilegales para el ingreso a los aeropuertos y terminales terrestres y marítimos. En el caso de Colombia los envían al Golfo de Urabá, al puerto de San Andrés de Tumaco, en Nariño e incluso a puntos fijos en la costa del Océano Pacífico y en los terminales aéreos y terrestres los envían a Pasto, Cali, Medellín y Turbo, entre otros destinos, donde están otros cómplices de las redes criminales”, señala el investigador de la Policía.
En el caso de las rutas marítimas internas para los migrantes ilegales, los antisociales los desplazan por Tumaco y Buenaventura para llegar a Juradó, puerto de salida, y por el otro lado a Turbo y Capurganá, puertos de salida. Y por vía terrestre, inicialmente ingresan a Ipiales, luego a Pasto y de ahí continúan con su itinerario pasando por Popayán, Cali, Bogotá, Medellín y otra alternativa de viaje a Bucaramanga y Cúcuta para salir por Venezuela.
En cuanto a la ruta por Centroamérica, Migración Colombia reveló que de acuerdo con los servicios de inteligencia, los coyotes llevan a los ilegales a Necoclí y Acandí por vía marítima para llegar a Puerto Obaldía y Albrook a Port en Panamá.
“Ya en suelo panameño, en algunos casos, los ilegales se desplazan por vía aérea y otros por vía terrestre a Paso Canoa, a San José de Costa Rica, a Peñas Blancas y a Managua, Nicaragua. También los viajeros continúan con su itinerario a Guasaje, a Tegucigalpa, Ocodopeque y Esquípulas, en Guatemala”, acotó.
Otros viajeros ilegales llegan a México y de inmediato se desplazan a la frontera donde otros coyotes los cruzan a EU.
La “dramática odisea” puede durar 10, 15 y 20 días o más, de acuerdo con las dificultades presentadas en el recorrido.
Los coyotes utilizan camiones cargados con mercancías, con frutas y otros productos agrícolas para ocultar a los ilegales y pasarlos al otro lado de la frontera y se pueden asfixiar. También pueden perecer en el desierto o ahogarse en el mar mientras son conducidos por los contrabandistas.