Las conversaciones de paz entre el Gobierno y Farc, que actualmente se realizan en Cuba, deberían concluir a más tardar en noviembre de 2013, dijo el presidente, Juan Manuel Santos.

"Esto no puede ser un proceso de años sino de meses. Es decir que esto debe durar no más allá del año entrante, noviembre del año entrante a más tardar, diría que antes", dijo el mandatario durante un evento del Partido Verde en el balneario de Cartagena (norte).

"Pero es importante tener paciencia y no exigir resultados inmediatos, porque la mesa es una mesa compleja, una mesa donde se están discutiendo unos temas muy complejos", agregó.

Delegados del gobierno y de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) comenzaron estas conversaciones el 18 de octubre en Noruega, en busca de una salida al conflicto armado que se prolonga por casi medio siglo y ha dejado cerca de 600.000 muertos, 15.000 desaparecidos y 4 millones de desplazados.

Las conversaciones se trasladaron luego a La Habana el 19 de noviembre, donde se inició la primera ronda de negociaciones entre las partes, en las que se agendaron cinco temas globales: desarrollo rural, drogas ilícitas, garantías de participación política, víctimas y fin del conflicto.

El pasado el 29 de noviembre las conversaciones entraron en un receso programado hasta el próximo el 5 de diciembre.

Respecto a la intención de las FARC de participar en política, Santos señaló que el gobierno está dispuesto a darle todas las garantías si quiere cambiar "las balas por los votos", aunque advirtió que no admitirá dilaciones o intentos por "hacer política con las armas".

"Si las FARC efectivamente quieren terminar el conflicto y pasar de las balas a los votos y hacer su política y tratar de lograr sus objetivos a través de los procedimientos democráticos, encontrarán en el gobierno toda la mejor disposición, todas las facilidades y garantías", aseguró el jefe de Estado.

"Pero si lo que pretenden es nuevamente poner sobre la mesa hacer su revolución por decreto ahí en la mesa en Cuba y transformar la Constitución y el país y sus políticas públicas, ahí no habrá paz", advirtió.

Las FARC (marxistas) son la guerrilla más antigua de América Latina, fundada en 1964, y cuentan en la actualidad con unos 9.200 combatientes, según datos oficiales.

"Por eso la agenda que se acordó y se firmó, tiene que ver con lo segundo (paz) y no con lo primero (participación en política): con la forma como pasan de las balas a los votos. Que hagan política, que se constituyan en un partido, que tengan garantías, todo eso estamos más que dispuestos. Pero no pueden hacer política armados", concluyó Santos.