Diálogos de paz estarían a punto de romperse | El Nuevo Siglo
Jueves, 26 de Septiembre de 2013

El jefe negociador del Gobierno en los diálogos de paz que se adelantan con las Farc en La Habana, Humberto de la Calle, se refirió a la advertencia de Timoleón Jiménez, alias ‘Timochenko’ realizó de publicar un informe sobre cómo va el proceso.

 

El gobierno colombiano aseguró que no se siente amenazado por el anuncio de la guerrilla de las Farc de publicar un informe sobre la "verdad" de las negociaciones de paz que se llevan a cabo en Cuba.

En una declaración pública en Bogotá, el jefe negociador Humberto de la Calle sostuvo que "ni una sola de las intervenciones del gobierno en La Habana se ha salido de los más estrictos lineamientos del estado de derecho y de la preservación del sistema democrático".

"Allí no hay, ni puede haber, ni aceptamos amenaza de ninguna naturaleza", afirmó De la Calle en respuesta a una carta del líder de las FARC, Timoleón Jiménez ('Timochenko'), en la que señaló haber encargado a sus negociadores la elaboración del documento.

Jiménez dijo el miércoles que tomó esa decisión ante la "ofensiva discursiva y mediática" del presidente Juan Manuel Santos contra la guerrilla y "lo que sucede en la mesa, con el exclusivo propósito de que el país y el mundo conozcan en verdad lo que ocurre".

 

La declaración de 'Timochenko' se conoció un día después de que Santos, en un discurso ante la Asamblea General de la ONU, instara a las FARC a acelerar la firma de un acuerdo de paz advirtiendo que "la paciencia del pueblo colombiano tiene su límite".

De la Calle expresó que en el proceso de paz "la retórica ha corrido por cuenta de las Farc", y recordó que "la confidencialidad fue pactada por ambas partes mediante la firma de plenipotenciarios de ambas partes y con el propósito de preservar la conducción del diálogo".

"De tal manera que para el gobierno la supuesta revelación de lo ocurrido en La Habana no constituye ni puede constituir ninguna amenaza", remarcó.

Agregó que "la mejor prueba de esto y el mayor seguro para la ciudadanía" es que cualquier acuerdo al que se llegue tendrá que ser refrendado por los colombianos, a través de un mecanismo que será consensuado con las Farc.

"Esa es la plena prueba de que todo esto será a la luz del día", aseveró el jefe negociador, quien atribuyó la molestia de las Farc a que el gobierno "sigue fiel a la agenda de conversaciones" que se discute desde noviembre de 2012.

 

Desde entonces las partes solo han llegado a consenso sobre uno de los cinco puntos de la agenda: el desarrollo agrario.

De la Calle anunció que los negociadores estarán en La Habana el próximo 3 de octubre para continuar el diálogo, ojalá en "un clima de buena fe, eficacia, seriedad y celeridad que es el que esperan todos los colombianos".