La deuda pública de España llegó en 2013 a un nivel récord, pese a las fuertes medidas de restricción presupuestaria adoptadas, alcanzando casi el 94% de su Producto Interior Bruto (PIB).
La deuda pública de la cuarta economía de la zona euro se situó exactamente en el 93,9% del PIB, contra 86% en 2012, informó este viernes el Banco de España.
Queda sin embargo por debajo del objetivo de 94,21% fijado por el gobierno.
Tras el estallido de la burbuja inmobiliaria española coincidiendo con la crisis financiera mundial en 2008, la deuda pública española se disparó. En 2007 solo representaba el 36,3% del PIB.
Según el plan presupuestario trasmitido en octubre por el gobierno español a la Comisión Europea, en 2015 superará el 100% del PIB del país, situándose en 101,13%, antes de estabilizarse en 101,09% en 2016, muy por encima del límite europeo fijado en 60% del PIB.
Este alza es preocupante pero tiene lugar en un momento de clara relajación en los mercados, que exigen a España tasas de interés históricamente bajas, lo que debería permitir al Tesoro español refinanciarse sin problemas.
En cifras brutas, la deuda de España alcanzó 960.640 millones de euros en el cuarto trimestre, un récord absoluto, frente a 884.731 millones un año antes.
La deuda de la regiones, que contribuyeron en gran medida al desajuste de las finanzas públicas desde 2008, representó 20,2% del PIB frente a 18% un año antes.
La más endeudada proporcionalmente de las 17 comunidades autónomas es Valencia (32,9%), mientras que en montante bruto Cataluña lleva la carga más pesada, con 57.146 millones de euros.
En un esfuerzo por reducir su elevado déficit público, el gobierno conservador de Mariano Rajoy impuso draconianas medidas de austeridad que suman 150.000 millones de euros de ajustes desde principios de 2012 a finales de 2014.
España tuvo que recurrir en 2012 a una ayuda europea de más de 40.000 millones de euros para sanear sus bancos, fragilizados por su fuerte exposición al sector inmobiliario.
Desde entonces, saneó el sector y salió de dos años de recesión, pero su desempleo sigue estando en niveles récord (26,03%) y su crecimiento continúa siendo muy débil (0,2% en el cuarto trimestre de 2013).