El presidente hondureño Porfirio Lobo "ha aceptado" la renuncia de su canciller, Mario Canahuati, y de su ministro de Seguridad, Oscar Álvarez, informó el gobierno.
El presidente "ha aceptado la renuncia" de ambos ministros, junto a la del subsecretario de Seguridad, Armando Calidonio, dijo su secretario personal, Reynaldo Sánchez, en rueda de prensa.
Los cambios en el gabinete de Lobo, que asumió el 27 de enero de 2010, eran un secreto a voces en fuentes políticas, y son atribuidos al mal desempeño de los funcionarios.
En lugar Álvarez "asume como encargado" el ex diputado Pompeyo Bonilla y en lugar de Canahuati "asumirá interinamente el vicecanciller Alden Rivera", añadió.
También aceptó la dimisión "al director del Fondo Hondureño de Inversión Social, Narry Asfura, y al director ejecutivo de la Dirección Ejecutiva de Ingresos (DEI), Oswaldo Guillén", dijo el secretario.
Por Asfura llega el subdirector adjunto Gunter Bustamante y por Guillén asume Enrique Castellón.
Canihuati y Alvarez tienen aspiraciones presidenciales y planean buscar la candidatura del gobernante Partido Nacional (derecha) para las elecciones de 2013, y se les reprocha que por esto habían descuidado sus carteras.
De hecho Lobo había marginado desde hace meses a Canihuati de actividades diplomáticas de relevancia, como la firma del Acuerdo de Cartagena, que bajo mediación de Venezuela y Colombia suscribió con el ex presidente Manuel Zelaya en mayo pasado, lo que permitió el regreso de éste último a Honduras.
AFP