Destinan $1 billón para atender crisis invernal | El Nuevo Siglo
Viernes, 9 de Diciembre de 2011

En Bogotá el número de damnificados es de 45 mil. No se les cobrará impuesto predial.

El fuerte invierno que azota al país continúa causando estragos, al punto que el Gobierno nacional optó por destinar un billón de pesos para afrontar la catástrofe.


“Decidimos trasladarle a la nueva Agencia de Gestión de Riesgo 1 billón de pesos para que atienda esas necesidades no solamente en la parte humanitaria –que se ha venido atendiendo en forma efectiva- sino que también atienda las demás necesidades, las viviendas que han sido afectadas, los campesinos que han perdido nuevamente sus cosechas”, declaró el presidente Juan Manuel Santos.


El Jefe de Estado explicó que el dinero será destinado exclusivamente a los damnificados de las lluvias actuales (últimos tres, cuatro meses) y que será trasladado a la Agencia hoy o a más tardar a principios de la próxima semana. Afirmó que se entregarán entre 1 y 3 millones de pesos por familia para el arreglo de viviendas y para que puedan mitigar los efectos de la actual temporada de lluvias.
En el caso específico de la emergencia por la que atraviesa el suroccidente de Bogotá, el Presidente dijo que se ordenó el traslado de unas embarcaciones para que ayuden en el manejo de la emergencia en la localidad de Bosa.


Al mismo tiempo, la acaldesa designada de Bogotá, Clara López Obregón, reportó que el número de damnificados en la capital del país pasó de mil a 45 mil en los últimos 3 días como producto de las inundaciones en Bosa y Kennedy.
La mandataria reconoció que ésta situación ha desbordado la capacidad de respuesta de los organismos de emergencia pero dijo que las ayudas están llegando.


López anunció que los damnificados por las lluvias no tendrán que pagar el próximo año los impuestos prediales, de vehículos y de Industria y Comercio.
Guillermo Escobar, director del Fopae, dio que se realizará un censo y se enviará un listado a la Secretaría de Hacienda con las personas afectadas a las que se le hará al exención de impuestos.


De la misma manera, se han implementado planes de contingencia como la inundación de predios para “desahogar”  ríos -como el Bogotá - o la apertura de compuertas de algunas represas -como Betania en el Tolima- , al tiempo que continúan registrándose tragedias por  deslizamientos e inundaciones en varios puntos de la geografía nacional y las alarmas se disparan por los altos niveles de los ríos.


El hecho más lamentable se registró en la mañana de ayer cuando el comandante de la policía de Santander, coronel Mario Aurelio Pedroza confirmó que no pudo rescatarse a tiempo a las dos mujeres que quedaron sepultadas por un alud que sepultó un bus de transporte interdepartamental en el sitio La Minifalda, a un kilómetro del municipio de Tona.
El autobus de Lusitania había salido de Bucaramanga y cuando iba a llegar a su destino (Tona) fue literalmente tragado por decenas de piedras y tierra. De los 10 pasajeros, cinco lograron salir con vida.


En el lugar fallecieron  el conductor del bus Manuel Castellanos, su hijo Diego Castellanos, los pasajeros Modesto Anaya y  Jorge Elí Sánchez.
Otra de las jóvenes que falleció, Jenny Marcela Morales, se había comunicado con su madre vía celular pidiendo ayuda.
La maduración de La Niña, fenómeno que como lo han admitido las autoridades meterológicas continúa en formación  mantiene los altísimos niveles de precipitaciones en todo el país disparando las alarmas por el aumento del cauce de los ríos (muchos de los cuales ya se han desbordado) y los altos niveles en canales y represas.


Así, en el Atlántico fue declarada la alerta roja por el aumento en los niveles del canal del dique y las  filtraciones de las aguas amenazan con desbordar el embalse del Guájaro.
Anoche, la cota de desbordamiento del canal es de 6.48 centímetros, lo que mantiene en alerta a los municipios ribereños como Manatí, Repelón, los corregimientos de la Peña y Aguada de Pablo en Sabanalarga, y los municipios de Santa Lucia, Suán y Campo de la Cruz.


En esta zona del departamento se construyen jarillones en los puntos críticos donde se filtra el agua, indicó el director de la CAR, Alberto Escolar.
Entre tanto en el Tolima, vastos sectores de los municipios de Ambalema y Honda comenzaron a inundarse por la apertura de compuertas de la represa de Betania, en el Huila, que ya no soportaba el alto nivel de sus aguas.