Hasta hace poco más de un mes el panorama en Millonarios era gris, pero la decisión del técnico Alberto Gamero de realizar cambios en la formación titular dando oportunidad a los jugadores formados en las divisiones inferiores, fue fundamental.
Los azules empezaron a ganar y aunque quedaron eliminados en la Copa Suramericana, le ganaron al Cali en Palmaseca y obligaron a la definición desde los 12 pasos.
A ello sumaron su victoria frente al América por 2-0, en la Liga Betplay, con lo que llegaron a 24 puntos, lo que les permite seguir ilusionados con la clasificación, aunque para ello deberán derrotar a Deportivo Pereira mañana en la capital del Risaralda, y a Alianza Petrolera el fin de semana en El Campín.
Sumado a que los azules no tienen margen de error, está que su clasificación no depende de sus resultados únicamente, sino de los de algunos de sus rivales.
Por ahora la posibilidad sigue latente y de acuerdo con lo dicho por el técnico Gamero, nos jugadores están metidos de lleno en la búsqueda de la clasificación.
El soporte de la esperanza de los azules es el grupo de canteranos que vienen recibiendo su oportunidad.
Los goles frente al América los marcaron dos jugadores con recorrido, Elíser Quiñónez y Ayron del Valle, pero en la formación fueron tenidos en cuenta seis jugadores de las divisiones interiores, algunos de ellos quienes ya habían tenido su oportunidad pero no continuidad y otros nuevos.
Gamero se dio la pela de sentar a dos arqueros con mucha experiencia, Cristian Vargas y Cristian Bonilla, y darle la oportunidad a Juan Moreno, quien le ha respondido y partido a partido se muestra más tranquilo y seguro.
En la defensa aparecieron Breiner Paz, Andrés Llinás y en el sector medular Steven Vega y Emerson Rodríguez, decisión osada, si se quiere, así en algunos casos haya sido motivada por la necesidad, pero que rindió sus frutos.
En el banco estuvieron Juan Camilo Salazar, quien jugó 8 minutos, Kliver Moreno y Diego Abadía, también formados en las divisiones interiores y quienes con el correr de los partidos van consolidando el patrimonio de un Millonarios que invierte grandes sumas de dinero para formar jugadores, pero casi nunca les brinda oportunidad.
Es posible que Millonarios no clasifique, pero los directivos deben estar felices y la afición tranquila porque Gamero está armando una base importante y los celestes, por primera vez en muchos años, no tendrán que pensar en cómo renovar la nómina, sino en sumar dos o tres jugadores de nivel para armar un equipo competitivo.
“El grupo, a pesar de haber jugado el miércoles, propuso un partido mano a mano. Teníamos el temor de la pelota quieta, pero me parece que mis dos centrales estuvieron impecables. Se hizo un esfuerzo grande. Felicitaciones para estos muchachos que quieren sudar la camiseta de Millonarios y clasificar a los ocho. ‘Me les quito el sombrero’”, dijo Gamero tras la victoria ante América.
Añadió, con relación a los jugadores jóvenes, que “me da alegría que son muchachos que van esperando su oportunidad, pero entran con amor y alegría. Me entusiasma por ellos, están creciendo. A los jugadores siempre les digo que no se preparen para un partido, sino que se preparen para un torneo. Muchas veces, los jugadores que menos juegan son los que más se preparan”.
Por su parte el técnico del América, Juan Cruz Real, dijo que “Honestamente, creo que hoy no salió nada de lo que planificamos, no hicimos un buen partido. “No creería que estar clasificado haya afectado el rendimiento. La idea es que tenemos que estar al más del cien por ciento para rendir en el nivel que queremos. Debemos apuntar a terminar lo más arriba posible”.