Por Alejandro Munévar

Enviado especial EL NUEVO SIGLO

San José, Costa Rica

El reloj rozaba las 10 de la noche en San José, Brasil destilaba talento contra Costa Rica en la cancha del Estadio Nacional, el marcador iba 4-0 a favor del equipo suramericano; sin embargo, no quitaban el pie del acelerador, eso sí, con cautela avanzaban y atacaban a las locales que a pesar de haber quedado eliminadas en primera fase de su mundial recibían el apoyo del noble público tico que no dejó de aplaudir a su equipo.

Por momentos se veía a Brasil desesperado por marcar un gol más, si se podía dos mejor. Si bien ya estaban clasificadas a segunda ronda, a los cuartos de final, las siempre poderosas brasileñas no dejaban de insistir en marcar un tanto más, ¿la razón? El hambre de gloria, la competitividad o quizá solo el hecho de tener que enfrentarse con Colombia en cuartos.

Y, sí, históricamente en todas las categorías del fútbol, femenino, masculino, Brasil ha mantenido una suerte de paternidad sobre los equipos colombianos. Teniendo esto en cuenta en cualquier pensamiento lógico, creer si quiera que Brasil estaba tratando de huir del enfrentamiento contra Colombia sería un disparate, pero no con la selección Sub 20, no con el equipo de Carlos Paniagua, Linda Caicedo, Gisel Robledo; no con estas guerreras.

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Los antecedentes

La última vez que este equipo se enfrentó con Colombia fue en el torneo clasificatorio al Mundial Sub 20 en la final, en donde Brasil se impuso 3-0. Normalmente en el fútbol y en todas las disciplinas ponderamos y valoramos el resultado final y no tanto el proceso o el cómo, por esta razón el marcador adverso para el onceno nacional pondría a la ‘Verdeamarela’ como favorita en esta contienda y no es que no lo sea, a fin de cuentas Brasil es un equipo campeón del mundo y suramericano, pero en el partido de cuartos será a otro precio.

Si bien, como quedó claro, Brasil ya le ganó a Colombia y por goleada, hablamos solo del marcador final, no del proceso, no del partido, un encuentro en donde Colombia incomodó, peleó, guerreó y plantó cara, algo que recuerda muy bien el onceno carioca.

No en vano el técnico brasileño Jonas Urias calificó a Colombia, en charla con EL NUEVO SIGLO, como “un equipo peligroso”, si bien en este mundial ha tenido problemas de definición, ha sido catalogado como un cuadro elegante, fuerte, alegre, por diferentes entrenadoras y jugadoras.

Urias es el técnico de Brasil, un equipo que siempre es favorito, a cuartos de final se clasificaron segundos del grupo A por detrás de España, 7 puntos, 7 goles a favor, 0 en contra.

Urias atendió a EL NUEVO SIGLO tras la victoria contra Costa Rica. Habló específicamente de la labor realizada por Carlos Paniagua al frente del equipo colombiano: “El profesor Paniagua ha realizado un gran trabajo, es un equipo rápido, inteligente, con mucho manejo de balón. Sorprendieron a Alemania y ganaron”.

El técnico brasileño también analizó lo que ha sido la participación colombiana en este mundial. Si hay alguien que conozca a las colombianas es él, pues ya las ha tenido que enfrentar. “Es un gran equipo, tiene un ataque muy rápido, en contraataque pueden ser certeras, tienen un grupo de jugadoras fantásticas, repito, lo que ha hecho el profesor Paniagua es fantástico, Colombia es un equipo muy peligroso”.

Por primera vez un equipo brasileño reconoce abiertamente la peligrosidad que puede tener un rival como lo es Colombia. Esto sobre el papel puede decir muchas cosas o no, pero mentalmente, para un equipo que siempre se ha creído invencible, súper poderoso, puede calar. Paniagua tiene que convencer a sus jugadoras desde el minuto 0 que Brasil NO es invencible, que también sufren, sangran en los duelos y sobre todo que el sábado a las 9 de la noche, no importarán las estadísticas, que no son una cosa diferente a un número que está hecho para romperse. La semifinal está a 90 minutos.