El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, quien asistió el martes en Pyongyang a un partido entre Corea del Norte y Corea del Sur, se dijo "decepcionado" por la ausencia de público en el estadio.
El encuentro clasificatorio para el Mundial-2022, que se saldó con un empate 0-0 y que no fue retransmitido en directo por televisión, se disputó a puerta cerrada en el estadio Kim Il Sung.
"Tenía ganas de ver un estadio lleno para este partido histórico pero me ha decepcionado ver que no había ningún espectador en las gradas", expresó Infantino, citado en un comunicado de la FIFA.
"Nos ha sorprendido esto y otros puntos, referentes sobre todo a la retransmisión en directo y a los problemas con los visados y los periodistas extranjeros", añadió.
"Para nosotros, la libertad de prensa y de expresión es esencial, pero por otro lado sería ingenuo pensar que podemos cambiar el mundo en un momento", añadió.
En el coliseo Kim Il Sung no había ni aficionados ni periodistas extranjeros para asistir a este duelo entre dos naciones que, técnicamente, todavía están en guerra.
El único eco hecho público del partido llegó procedente de la página web de la FIFA y de la Confederación Asiática de Fútbol (AFC), con permiso para divulgar una escueta información.
La selección surcoreana llegó el lunes, solamente acompañada por su seleccionador, el portugués Paulo Bento, y por el cuerpo técnico y directivo.
Antes de volar a Pyongyang, se pidió a los surcoreanos que dejaran sus celulares en su embajada en China.