En la final de la Copa América protestó, hizo gestos obscenos con las manos, pateó una botella de agua y golpeó la cabina del VAR.
El delantero brasileño Gabriel Jesús fue sancionado por la Conmebol con dos meses de suspensión con su selección por la expulsión en la final de la Copa América del mes pasado, anunció el organismo rector del fútbol sudamericano.
El atacante del Manchester City de 22 años fue decisivo para el 3-1 del partido contra Perú que dio a Brasil la novena corona en la competición continental, pero fue expulsado 20 minutos antes de acabar el partido.
Antes de salir del campo entre lágrimas protestó amargamente, hizo gestos obscenos con las manos, pateó una botella de agua y golpeó la cabina del VAR.
"El jugador fue suspendido tanto para los partidos oficiales como los amistosos con su equipo nacional durante este periodo", dijo la Conmebol en un comunicado el miércoles por la noche.
Además también le impusieron una multa de 30.000 dólares y le dieron siete días para apelar, mientras que la federación brasileña recibió una multa de 15.000 dólares por el comportamiento de sus jugadores.
Jesús, delantero del Manchester City, fue una pieza clave de Brasil en la primera mitad de la final de la Copa América contra Perú, con una magnífica corrida que creó espacios para cruzar a Everton y abrir el marcador.
Casi en la última jugada de la primera mitad, el delantero repuso la ventaja de Brasil tras del empate del capitán de Perú, Paolo Guerrero.
Pero se desesperó después de ver la segunda amarilla por una jugada contra el peruano Christian Cueva.
Ahora se perderá dos amistosos el próximo mes en Estados Unidos, contra Colombia y Perú.
Aun así podrá jugar en marzo, cuando empiecen las clasificatorias al Mundial 2022.