El exjugador de Atlético Huila trabaja en su academia, Cancerbero, y se dedica a formar personas que quieran mejorar día a día
Ser arquero es uno de los trabajos más complicados en el fútbol. La presión para los guardametas siempre será superior en comparación con otras posiciones porque un error en esa zona se paga caro. En muchos casos, rendimientos individuales de porteros salvaron partidos, brindaron títulos y llenaron de alegrías a la afición. En otros, un fallo de una noche infortunada se pudo transformar en uno de los peores momentos a nivel personal y profesional.
Breiner Castillo fue uno de los porteros que marcó diferencia en el fútbol colombiano por su disciplina y temperamento dentro de los terrenos de juego. En su plano profesional, el hombre de Nariño se destacó en conjuntos como Deportivo Cali, Millonarios, Atlético Nacional, Independiente Medellín y el Atlético Huila, entre otros.
En más de una oportunidad su experiencia le otorgó la banda de capitán en varios planteles. De igual manera, levantó títulos con el Deportivo Cali en dos ocasiones. Con los azucareros conquistó la Primera División de 1996 y de 1998. Ya al finalizar esta etapa, intentó probar suerte como asistente técnico de Rionegro Águilas, en donde prefirió tomar un paso al costado para darle pie a su academia, Cancerbero, que busca formar nuevas figuras en el arco y está ubicada en la ciudad de Medellín.
EL NUEVO SIGLO: ¿Qué actividades realiza en su nueva etapa?
BREINER CASTILLO: En este momento estoy trabajando con mi academia, de lleno, soñando con todos estos niños. Es un mundo totalmente diferente y tengo más tiempo con mi familia, puedo estar más atento. Se llama Cancerbero la academia, está ubicada en la ciudad de Medellín. Recibimos niños de todas las edades desde los cinco años. Pensamos en personas que no lograron ejercer la profesión o trabajar al ritmo nuestro. Aquí podrán desarrollar el talento en el arco y mejorar día a día. Entendemos que muchos anhelan llegar al profesionalismo pero ponemos metas paso a paso para que ellos más que nada avancen en todos los aspectos, tanto físicos como personales.
ENS: ¿Cómo es el entrenamiento de un arquero?
BC: Es un entrenamiento de alto nivel, como cualquier posición. El trabajo tiene de todo, en la academia contamos con una metodología, ya establecida en donde desarrollamos todos los elementos físicos y tácticos que lleva ser un arquero. Nos ponemos objetivos mensuales y semanales, trabajamos con microciclos. Los que están con nosotros gozan de una formación en todos los aspectos. Todo también depende de la edad en la que se encuentre cada arquero, de acuerdo a la edad se aumenta o disminuye el nivel de exigencia para evitar lesiones e inconvenientes físicos.
ENS: ¿Cómo ve el arco de la Selección Colombia en este momento?
BC: Estamos muy bien, contamos con unos arqueros desde ya algunos años. David (Ospina) ya sobrepasó los 100 partidos con la tricolor y la condición que mostró en estos 10 años fue excelente. En su paso por el Arsenal rindió, cuando militó en la Liga francesa también rindió y hace poco el Nápoles se quedó con sus derechos deportivos lo que confirma que también está rindiendo en el Calcio. Hoy se acercaron jóvenes con muy buenas acciones como lo son Álvaro Montero de Tolima, Aldair Quintana que hace poco firmó con Nacional y tendrá un nivel de exigencia mayor y Éder Chaux de Patriotas, quien cuenta con un rol fundamental para el equipo, esperamos que dentro de poco dé un salto a un conjunto donde pueda explotar al máximo.
ENS: ¿Qué tiene el arquero colombiano que lo hace diferente a los demás?
BC: No solo a nivel colombiano, es un tema suramericano. Es muy diferente a lo que les gusta en Europa. Es un desempeño totalmente distinto porque aquí se enseñan aspectos que no se tienen allá. De Colombia salieron muy buenos arqueros como lo fueron Óscar Córdoba, Faryd Mondragón, René Higuita pero si revisamos el plano de Suramérica nos damos cuenta que el estilo es similar en todos los países. Son arqueros fuertes, que salen bien y que ganan en los mano a mano.
ENS: ¿Cuál fue el momento más duro de su carrera?
BC: Mi último año por el tema de la lesión. Nunca había tenido una lesión tan grave en mi carrera y pues fue un cierre que no me esperaba. El estar alejado de las canchas después de dedicarle tanto tiempo al mismo trabajo es complicado. Por fortuna se superaron las cosas y hoy las veo de forma diferente, sin embargo, eso no quita el hecho que fue muy duro no poder realizar esta actividad tan bonita que es el fútbol.
ENS: ¿Qué fue lo más especial de su carrera?
BC: Me considero una persona afortunada al saber que debuté en el fútbol profesional y conseguí cumplir uno de mis sueños. En el fútbol disfruté todo, los viajes, los hoteles, el día a día, los entrenamientos. Fue una etapa que viví con mucha pasión, es una bendición para mí poder disfrutar el deporte sin importar las circunstancias y la experiencia de jugar, lo disfruté al máximo en todo momento.
ENS: ¿Cuál es la enseñanza que le dejó el fútbol a nivel personal?
BC: El no entregarse nunca, el siempre despertar con una sonrisa, nunca va a ser color de rosa pero uno debe tener carácter para enfrentar las cosas. Por supuesto que el fútbol no es fácil, la vida no es fácil. Siempre se presentarán inconvenientes que quedarán como experiencias que más adelante nos ayudarán a mirar atrás y ver todo superado con calma. Disfruté mucho el deporte, lo disfruto hoy con una nueva labor que es importante, como lo es formar a las personas y siempre me levanto con una sonrisa al pensar que puedo seguir haciendo lo que me gusta.