Las fuerzas del régimen sirio mataron ayer a un centenar de personas, entre ellas a niños y mujeres, en la región de Hama, en el centro de Siria, declaró el Consejo Nacional Sirio (CNS), principal coalición de la oposición.
"Tenemos un centenar de muertos en las poblaciones de Al Kubeir y Maarzaf, entre ellos unas veinte mujeres y veinte niños", declaró Mohamed Sermini, un portavoz del CNS, que acusó a las fuerzas del régimen y a sus milicias de estar detrás de esa "matanza".
Sermini llamó además a los observadores internacionales, encargados de supervisar el alto el fuego, vigente desde el 12 de abril, pero violado cotidianamente, a trasladarse inmediatamente al lugar del drama.
Interrogado por la AFP, el director del Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), Rami Abdel Rahmane, habló igualmente de una "matanza".
Entre tanto Estados Unidos que estaba listo para apoyar una acción fuerte de la ONU contra Siria, bajo el capítulo VII de la Carta de Naciones Unidas, como lo pidió la Liga Árabe.
"Nosotros, Estados Unidos, esperamos que todos los países responsables se adhieran pronto a tomar acciones apropiadas contra el régimen sirio, especialmente, si es necesario, a acciones en el Consejo de Seguridad de la ONU en el marco del capítulo VII, como lo pidió la Liga Árabe el fin de semana pasado", dijo el secretario del Tesoro Timothy Geithner en Washington.
"Ante la ausencia de señales serias de conciliación (de parte del régimen del presidente sirio Bashar al Asad), iremos pronto en esta dirección", dijo Geithner, al hacer referencia a esta disposición que permite aislar totalmente a un país mediante un fuerte régimen de sanciones.
Bajo el capítulo VII de la Carta de la ONU, "el Consejo de Seguridad puede decidir qué medidas que no impliquen el empleo de la fuerza armada deben ser tomadas para que sus decisiones tengan efecto, y puede invitar a los miembros de Naciones Unidas a aplicar esas medidas".
"Estas pueden incluir la suspensión completa o parcial de las relaciones económicas y de las comunicaciones ferroviarias, marítimas, aéreas, postales, telegráficas, radioeléctricas y de otros medios de comunicación, así como la ruptura de las relaciones diplomáticas", detalla el texto.
La Liga Árabe pidió el sábado a la ONU recurrir al capítulo VII para imponer la suspensión de las relaciones diplomáticas y sanciones a Siria, donde la aplicación del plan de paz del emisario internacional Kofi Annan está estancado.
El capítulo VII también prevé la posibilidad de recurrir a la fuerza en caso de amenazas contra la paz, pero la Liga Árabe aclaró que no pide "ninguna acción militar". Estimó que eso es algo que debe decidir el Consejo de Seguridad.
Frente a la sangrienta represión de las autoridades de Damasco contra las manifestaciones en Siria, Estados Unidos estableció un arsenal de sanciones que prohíben a sus ciudadanos comerciar con el Estado sirio o con un cierto número de sus dirigentes, comprar petróleo sirio, al tiempo que impiden el uso del sistema financiero estadounidense a varios grandes bancos sirios.
En ese sentido, Geithner exhortó a los países que aún no lo hicieron a seguir el ejemplo de Estados Unidos y "reaccionar rápidamente" para "adoptar sanciones oficiales contra el régimen sirio".