Un verdadero cuello de botella se presenta en la ejecución de 78 kilómetros de la Ruta del Sol, entre las poblaciones de Villeta y Guaduas, denunciaron los transportadores de carga.
De acuerdo con el presidente de Colfecar, Jaime Sorzano, los empresarios del sector se encuentran en la sin salida en la que, aparentemente, ha caído el desarrollo de este tramo de uno de los principales corredores viales del país.
En carta dirigida al Ministerio de Transporte, Sorzano sostiene que esta situación “nos hace recordar fenómenos que creíamos superados, como el ingratamente denominado Comsa, cuyos costos no terminaremos de pagar todos los colombianos”.
Indica el representante gremial que al parecer la adjudicación del tramo al Consorcio Helios se hizo de manera apresurada, sin tener certeza de las implicaciones de esta decisión. Con el correr de los días y a medida que se dispuso de mayor y mejor información salieron a la luz problemas al parecer insalvables de carácter geológico y medio ambiental que prácticamente colocan el trazado original en condiciones inviables para su ejecución.
Sin embargo la principal preocupación de los transportadores radica en el punto muerto en el que han caído las conversaciones entre las autoridades (Agencia Nacional de Infraestructura- ANI) y el consorcio adjudicado, respecto a la búsqueda de una solución.
Indica Sorzano que “mientras la ANI exige al concesionario respetar el trazado original, otras agencias del Estado, en este caso la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales – ANLA, mediante resolución 0227 de abril del presente año, no admite la sustracción de la zona de reserva forestal protectora de la cuenca hidrográfica del Río San Francisco”.
Añade el directivo de Colfecar que “tampoco permite la afectación de la zona de reserva de la esmeralda. Tampoco permite levantar la veda a especies amenazadas. El Plan de Ordenamiento Territorial del municipio de Guaduas así mismo declara como estratégico el ecosistema de la reserva hidrográfica de San Francisco”.
Explica el dirigente que sin embargo el trazado original cruza y afecta decisivamente estas zonas de reserva. De otro lado los estudios geológicos y geotécnicos señalan que las condiciones del terreno por donde debe transcurrir la vía, ponen en riesgo la estabilidad de las obras que se construyan requiriendo hacia el futuro la aplicación de permanentes programas de monitoreo, reparación, refuerzo y reconstrucción, lo cual extiende hacia el infinito los costos de mantenimiento de la calzada.
“Siendo que el concesionario propone una alternativa de nuevo trazado que, si bien es cierto representa la realización de un túnel de 9.4 kms. con costos adicionales de 500 millones de dólares, dicha alternativa al parecer respeta las reservas forestales sin afectar los requisitos medio ambientales y evadiendo la inestabilidad geológica y geotécnica del corredor adjudicado”, dice Sorzano en su misiva a la Ministra de Transporte.
Añade el dirigente gremial que “también al parecer representa menores costos operaciones hacia el futuro. Cualquiera que sea el escenario, los transportadores reclamamos una solución pronta y efectiva que permita la realización del proyecto y que este no caiga en el congelamiento definitivo porque al fin y al cabo el mayor de los costos está representado en el ‘no hacer”.