Denuncian anexión rusa de Crimea: Asamblea de ONU | El Nuevo Siglo
Jueves, 27 de Marzo de 2014

La Asamblea General de la ONU aprobó el jueves por una clara mayoría una resolución no vinculante en defensa de la integridad territorial de Ucrania que denuncia la "anexión" rusa de Crimea, en un votación que mostró a América Latina muy dividida.

La resolución presentada por Ucrania y apadrinada por las potencias occidentales, obtuvo 100 votos a favor, 11 en contra y 58 abstenciones, constató la AFP.

Ucrania recurrió a la Asamblea General, órgano en el que pueden votar los 193 países miembros de la ONU, tras el veto de Moscú a esta cuestión en el Consejo de Seguridad el 15 de marzo, un día antes del referéndum en el que Crimea decidió incorporarse a la Federación Rusa.

Ucrania y las potencias occidentales han declarado ilegal al referéndum. A diferencia del Consejo de Seguridad, las resoluciones de la Asamblea General no son vinculantes, por lo que la votación es más bien simbólica.

Estados Unidos y los países de la Unión Europea votaron a favor, al igual que Chile, Colombia, Perú, México, Panamá, Costa Rica y Honduras.

Entre quienes votaron en contra de la resolución estuvieron Venezuela, Bolivia, Nicaragua y Cuba, además de Rusia.

Se abstuvieron en cambio China, India, Brasil, Argentina, Uruguay, Ecuador, Paraguay y El Salvador, entre otros.

"Estoy mus satisfecho con el voto. Una inmensa mayoría de naciones del mundo apoyó esta resolución", dijo el ministro ucraniano de Relaciones Exteriores, Andrii Deshchytsia, presente en Nueva York para defender el texto.

Antes, al abrir la sesión en el hemiciclo de la sede de la ONU, Deshchytsia denunció que Crimea fue "anexado de manera forzosa por un país que antes se había comprometido a garantizar la integridad territorial de Ucrania" según el Pacto de Budapest de 1994, en el que Kiev renunció a su arsenal nuclear.

Más aún, afirmó que la "agresión meticulosamente calibrada" fue llevada a cabo por "un país miembro permanente del Consejo de Seguridad en el que la ONU ha confiado y dado responsabilidad para el mantenimiento de la paz y la seguridad mundial".

"Lo que ocurrió en mi país es una violación directa de la Carta de las Naciones Unidas. Estoy seguro de que este voto ayudará a disuadir nuevas agresiones", agregó.

- Rusia habla de "victoria moral" -

De su lado, el embajador ruso Vitali Churkin, clamó una "victoria moral" de la diplomacia de su país, argumentando que "casi la mitad" de los Estados miembros de la ONU se negaron a apoyar la resolución.

"Un creciente número de países está empezando a entener la complejidad de la situación y los motivos detrás de las acciones de Crimea y la Federación Rusa", explicó a la prensa.

En el recinto, Churkin respondió a las acusaciones de Ucrania y Occidente denunciando una "resolución de la confrontación" y pidiendo a la comunidad internacional que "respete la decisión de Crimea como la respetó" Moscú.

Churkin afirmó que la "violencia" se había convertido "en norma de la vida política en Ucrania", tras la destitución del presidente prorruso Viktor Yanukovich en febrero pasado, que motivó la intervención de Moscú.

De su lado, la embajadora estadounidense Samantha Power advirtió sobre el "mundo peligroso" que espera en caso de que se acepte la "coerción" como instrumento para aplicar el principio de autodeterminación.

De lado de América Latina, hablaron representantes de varios países, entre ellos Brasil y Cuba, el primero con una postura ambigua que marcó su abstención y el segundo con un discurso crítico hacia Estados Unidos y la OTAN por inmiscuirse en la zona histórica de influencia rusa.

"Brasil apoya todos los esfuerzos para una solución pacífica de la crisis e invita a la partes a un diálogo inclusivo", dijo Antonio Patriota, reflejando la posición de varios socios de la región, que han evitado pronunciarse abiertamente sobre la cuestión.

La crisis en Ucrania y la incorporación de Crimea en la Federación Rusa han desatado una fuerte crisis internacional.

Estados Unidos y la Unión Europea (UE) han impuesto sanciones económicas a Moscú con el objetivo de que revea su posición.