Catar dijo que las demandas de los países árabes en la crisis diplomática de la región eran "irrealistas".
El ministro de Exteriores catarí, jeque Mohammed bin Abdulrahman Al Thani, las calificó en una rueda de prensa en Doha de "irrealistas e inaplicables".
"No es terrorismo, estamos hablando simplemente de acabar con la libertad de expresión", dijo en una rueda de prensa conjunta con su homólogo alemán, Sigmar Gabriel.
Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos, Bahréin y Egipto, que acusan a Catar de apoyar el extremismo, dieron 48 horas al país para que cumpla sus exigencias, después de que otro ultimátum inicial de diez días expirara el domingo.
Las demandas incluyen dejar de apoyar a los Hermanos Musulmanes, cerrar la cadena de televisión Al Jazeera, rebajar sus relaciones diplomáticas con Irán y cerrar una base militar turca en su territorio.
El jeque Mohammed dio una repuesta oficial al ultimátum el lunes a través de Kuwait, que actúa como país mediador, pero su contenido no se ha hecho público.
Este martes el ministro no quiso dar detalles pero aseguró que Catar está buscando una solución a través del diálogo a esta crisis que dura desde hace más de un mes.
"El estado de Catar adoptó una actitud muy constructiva desde que empezó la crisis. Estamos intentado actuar de manera adulta y discutir la cuestión", aseguró.
Hace un mes Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos, Bahréin y Egipto cortaron sus relaciones diplomáticas y sus vías de transporte con Catar. También amenazan con nuevas sanciones si el país no cumple con sus exigencias.
Los ministros de Exteriores de los cuatro países se reunirán en Egipto el miércoles para hablar de la crisis diplomática, la peor en la región en años.
"Los cuatro países recibieron la respuesta de Catar a través de Kuwait, antes de la fecha límite. Se le dará una respuesta dentro del tiempo establecido", tuiteó el miércoles la cancillería saudita.
Catar, que niega apoyar a los extremistas, asegura que no cederá a la presión y asegura que las demandas no se pueden cumplir.
El emirato es el líder mundial de la producción de Gas Natural Licuado (LNG) y este martes Qatar Petroleum, la petrolera nacional, anunció unas previsiones para producir 100 millones de toneladas de gas natural al año en 2024, un 30% más que los niveles actuales.
"Este nuevo proyecto reforzará la posición de líder de Catar", dijo el presidente de la compañía, Saad Sherida Al Kaabi. "Seguiremos siendo líderes del LNG durante mucho tiempo"
'Ningún miedo'
Algunos responsables han dado a entender que si Catar no coopera Arabia Saudí y sus aliados podrían pedir a las compañías extranjeras que elijan entre ambos.
Pero Kaabi aseguró que "no tenemos absolutamente ningún miedo de un embargo".
Arabia Saudí y sus aliados también acusan a Doha de ser demasiado cercanos a Irán —el rival de muchos países de la zona— con el que Catar comparte un enorme campo gasífero.
La crisis diplomática hace temer más inestabilidad en la región, donde hay algunos de los principales exportadores de energía del mundo y que es clave estratégicamente por la presencia de bases militares de Estados Unidos.
Las riquezas gasíferas de Catar han transformado en los últimos años a este país en uno de los más ricos del mundo, un importante inversor que en 2022 celebrará el Mundial de fútbol.
Catar también ha llevado a cabo una política exterior más libre que las de sus vecinos, que suelen seguir el liderazgo de Arabia Saudí, la gran potencia regional.
Por su parte el ministro de Exteriores de Emiratos Árabes Unidos, jeque Abdulá bin Zayed al Nahyan, dijo el martes que era "prematuro" hablar sobre nuevas acciones contra Catar y aseguró que cualquier medida estará "dentro del marco de la ley internacional".