Demandas contra el Estado siguen generando polémica | El Nuevo Siglo
Sábado, 20 de Abril de 2013

Tras la demanda por 6.000 millones de pesos que interpuso por los perjuicios que le produjo los seguimientos e interceptaciones telefónicas ilegales realizadas por el DAS, la exsenadora Piedad Córdoba aclaró no está buscando lucrarse con este dinero.

 

Según explicó, de prosperar la querella, los recursos serán utilizados en la construcción y reparación de vivienda para las familias víctimas de la violencia en el Chocó: “He solicitado que los 6.000 millones se destinen a comunidades desplazadas del Chocó, territorio de esperanzas silenciadas. La indemnización dimensiona daños causados a un ejercicio político a favor de la causas de las y los excluidos. Que el dinero sea para ellos”.

En la demanda se afirma que la excongresista tiene derecho a ser reparada económicamente, física y moralmente, porque “están comprobadas las consecuencias que además de ella le trajo dichos seguimientos a su núcleo familiar, un grupo de asesores políticos y amigos”.

 

“No se imaginan lo que significa sentirse perseguida, acosada, agredida, denigrada. Todo por el simple hecho de pensar diferente”, dijo Córdoba.

Frente a las millonarias demandas contra el Estado, el exprocurador Carlos Gustavo Arrieta consideró que es obligación de la Nación indemnizar cuando se comprueba que este fue responsable de un daño a algunos de sus ciudadanos.

“Puedo decir que es normal que cuando el Estado causa un daño a una persona, tiene que indemnizarla. Esa es la regla general”, dijo.

Arrieta explicó que “las demandas en todas partes son multimillonarias.  El problema es poder probar lo que se pide. Se tiene que probar el daño y el monto del perjuicio. Yo tengo que demostrar que mi perjuicio vale cierta cantidad de plata, pero sin en el proceso se demuestra que el daño ocurrido vale, por ejemplo, 100 millones de pesos, pues eso le van a pagar”.

 

Sin embargo advirtió que “hay muchas demandas que son simplemente un chantaje al Estado, eso es lamentable. Yo no puedo decir que esta sea eso, pero la experiencia muestra que como existen muchas demandas que tienen sustentos lógicos, hay otras que son temerarias abusivas e irresponsables”.