Por los millonarios desfalcos en la contratación en Bogotá, la Superintendencia de Sociedades declaró de forma automática la muerte comercial al “clan Nule”, integrado por los primos Miguel, Manuel y Guido Nule.
Esta decisión de Superservicios comprende un tiempo de 10 años y está sostenida en la gravedad de las acciones de los polémicos empresarios.