El fundadory director ejecutivo de Facebook, Mark Zuckerberg, dijo ayer que llamó al presidente Barack Obama para decirle que el Gobierno estadounidense está socavando la confianza en internet con sus vastos programas secretos de vigilancia.
"Llamé al presidente Obama para expresarle mi frustración por el daño que el Gobierno está haciéndole a nuestro futuro", dijo Zuckerberg en un texto en su página de Facebook, en el que mostró su irritación con Washington, luego de las revelaciones sobre programas de espionaje estadounidenses.
"Desafortunadamente, parece que tomará un tiempo muy largo para que se dé una reforma completa", lamentó Zuckerberg. "El Gobierno de Estados Unidos debería ser un defensor de internet, no una amenaza. Debe ser mucho más transparente con respecto a lo que está haciendo, o de otra manera la gente creerá lo peor", agregó.
Los comentarios tienen lugar un día después de la publicación de un informe que sostiene que la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) imitó un servidor de Facebook para inyectar un software malicioso a las computadoras con el objetivo de expandir su capacidad para recoger información.
En respuesta a esa información, la NSA, dirigida por el general Keith Brian Alexander, indicó a través de un breve comunicado que esas afirmaciones son "erróneas".
"NSA utiliza sus capacidades técnicas solo para apoyar operaciones de inteligencia en el extranjero legales y apropiadas, todas en conformidad con sus autoridades", indicó la agencia estadounidense, que reiteró que no oculta sus actividades tras las páginas web de empresas de Estados Unidos.
"Los reportes de operaciones de explotación indiscriminada de ordenadores son simplemente falsos", comunicó la NSA.
Sin embargo, para Zuckerberg, "cuando nuestros ingenieros trabajan incansablemente para mejorar la seguridad, nosotros imaginamos que nos estamos protegiendo de criminales, no de nuestro propio gobierno"./AFP
Mark Zuckerberg
El Gobierno de Estados Unidos debería ser un defensor de internet, no una amenaza
Keith Brian Alexander
Los reportes de explotación indiscriminada de ordenadores son simplemente falsos