El Congreso resolvió archivar la reforma judicial aprobada hace una semana que no llegó a entrar en vigor por el fuerte rechazo del gobierno y la opinión pública por los beneficios que proporcionaba a los legisladores.
Sin votos en contra, las dos cámaras del Congreso aprobaron revertir la iniciativa en un periodo legislativo extraordinario convocado por el presidente Juan Manuel Santos con el único propósito de "hundir" la reforma en su totalidad.
"Gracias a los congresistas que votaron por el hundimiento de la Reforma a la Justicia. Le evitaron un gran daño al país", escribió este jueves Santos en su cuenta de Twitter.
El presidente de la Cámara, Simón Gaviria quien exhortó a sus homólogos a dar pronto trámite al proyecto dijo que deben crear una comisión con todos los partidos para pedirle perdón a la sociedad por los vicios cometidos en el acto legislativo.
Por su parte, el ministro del Interior, Federico renjifo, dijo que “aquí hubo un acto de la mayor importancia, con el mayor respeto. El Congreso debatió por dos días a fondo los instrumentos de objeción que el Gobierno Nacional presentó por primera vez. Me siento bien, creo que el Congreso respondió responsablemente y, obviamente, mi tarea de aquí al 20 de julio es fortalecer la Mesa de Unidad Nacional para que siga como tiene que operar, con la crítica y el respeto reflejados especialmente en estos dos días”.
Los 50 certificados de incapacidades médicas que fueron radicados en las secretarías de Senado y Cámara de Representantes, fueron publicados en la gaceta de la plenaria para que quede para el acta del pleno.
Sobre las ocho de la mañana estaba programada la cita, sin embargo, la sesión arrancó pasadas las 10 de la mañana.
La reforma, aprobada el 21 de junio en la última jornada del primer periodo de sesiones, complicaba la pérdida de investidura parlamentaria de diputados y senadores por la comisión de algún delito.
También podría haber permitido una excarcelación masiva de funcionarios ya investigados por delitos graves, entre otros puntos que el gobierno, impulsor de la iniciativa, consideró inaceptables y que argumentó que fueron incluidos a última hora sin su conocimiento.
La misma noche de la aprobación, el presidente Santos anunció que devolvería la reforma al Congreso por razones de constitucionalidad e inconveniencia.
En medio del escándalo, muchos congresistas justificaron su voto a favor de la iniciativa aludiendo a presiones del gobierno.
El ministro de Justicia Juan Carlos Esguerra presentó su dimisión el viernes asumiendo la responsabilidad política del texto final de la reforma, cuyo objetivo original era agilizar la administración y aplicación de justicia.