Después de un año largo de denuncias, recusaciones, impedimentos y mucha fuerza de la oposición, el cupo de endeudamiento fue aprobado por el Concejo para obras de infraestructura urgentes que necesita la ciudad pero que solo se podrá utilizar el próximo año debido a los trámites que se requieren.
En un estudio, la Veeduría Distrital considera que debido al bajo nivel de ejecución de la inversión directa es probable que en lo que resta del año la presión por llevar adelante los proyectos a financiar con crédito-cupo la capacidad institucional y la ejecución presupuestal se vea aún más afectada.
La veedora distrital Adriana Córdoba recomienda a la Administración mantener la prudencia y sensatez en el uso de los recursos de crédito y responder de manera suficiente con la ejecución de los recursos disponibles, antes de empezar a comprometer en créditos de difícil ejecución la seguridad y sostenibilidad fiscal de la ciudad.
Se debe garantizar que los proyectos a financiar están debidamente formulados y diseñados y que los acuerdos crediticios, entre otros los desembolsos, sean coherentes con la programación de la ejecución de las obras.
De igual manera, la veedora Córdoba recomienda mejorar la dinámica de ejecución de los recursos en la próxima vigencia.
Para el año 2013 es poco probable que se puedan estar ejecutando los recursos provenientes del cupo de endeudamiento, ya que el primer paso a seguir es conseguir formalmente el aval del Gobierno nacional para formalizar los créditos y legalizarlos.
De acuerdo con los tiempos estimados por la Administración distrital, éste podría ser de 2 meses. Posteriormente, una vez situados los recursos en las entidades, iniciar los procesos licitatorios que implican de 2,5 a 3 meses. Conclusión, no es viable la ejecución de estos recursos en la presente vigencia.
Teniendo en cuenta que el sector de movilidad recibirá 2,5 billones para adelantar proyectos como cables aéreos en San Cristóbal y Ciudad Bolívar, troncal de Transmilenio en la Av. Boyacá, obras de integración del sistema Transmilenio, intervenciones de espacio público y ciclorrutas y algunas importantes avenidas, la Veeduría considera que entidades como el Transmilenio, Secretaría Distrital de Movilidad y el IDU deben mejorar su capacidad de ejecución.
El IDU, con 880.000 millones de pesos, tiene a la fecha la más baja ejecución, con el 17 por ciento. El proyecto “Desarrollo y Sostenibilidad para la Infraestructura de la Movilidad” no llega a una ejecución del 7 por ciento.
El cupo de endeudamiento aprobado para recreación y cultura es de 37.050 millones de pesos, destinados a la construcción de los parques El Tabora en Engativá, Las Margaritas en Kennedy, La Esperanza en Bosa y la Victoria en San Cristóbal, entre otros. Sin embargo, es preciso mencionar que proyectos como “la construcción y adecuación de parques y escenarios para la inclusión”, con una asignación de 31.620 millones en la presente vigencia, a la fecha tan solo lleva comprometido el 5 por ciento y girado el 2 por ciento.
El cupo de endeudamiento aprobado para la educación es de 401.290 millones de pesos, destinados al reforzamiento de colegios. La inversión en el reforzamiento o restitución total de la infraestructura escolar llegará a 15 localidades, siendo la inversión en algunas de ellas: Kennedy 78.000 millones, San Cristóbal 65.000 millones y Engativá 53.000 millones.
En la presente vigencia proyectos como el “Centro Distrital de Ciencia, Biotecnología e Innovación para la Vida y la Salud Humana”, con una asignación de 12.500 millones de pesos, lleva ejecutado a 31 de agosto el 10 por ciento y girado el 3 por ciento.
Obras sin cupo
Teniendo siempre presente el poder ofrecer una mayor y mejor conectividad en el transporte público de la ciudad, la administración distrital también ha realizado esfuerzos para, a través de distintos frentes de financiación poner en marcha obras que le cambiarán la cara a la forma en que se movilizan las bogotanas y bogotanos.