Reducir la presencia de signos de la edad y lucir un rostro más firme son los deseos de toda mujer. Y por supuesto, esto se puede lograr gracias a la practica de yoga facial.

Cuando se habla de este tipo de ejercicio, a muchos se le viene a la cabeza todo aquello relacionado con la meditación, la respiración, estiramientos y otros movimientos de relajación asociados a esta práctica deportiva.

Sin embargo, existe otra variante de esta disciplina que puede ser muy beneficiosa. Se trata de una serie de ejercicios enfocados en el cuello y en el rostro que ayudan a tonificar los músculos de la zona, a reducir la presencia de signos de la edad.

Una serie de entrenamientos para liberar la piel del estrés facial y así poder lucir un rostro terso, luminoso y listo para vivir momentos únicos.

Además, para conseguir resultados óptimos y aumentar los efectos del yoga es recomendable complementar estos ejercicios con algunos cosméticos, como el sérum, crema hidratante o tónico, que darán un plus de hidratación y luminosidad a la piel y potenciarán la efectividad de esta práctica que se convertirá en el mejor aliado.

Cuidado de labios y mandíbula

Inclinar la cabeza de forma suave hacia atrás mirando hacia arriba. Una vez en posición, el siguiente paso es hacer ver que das un beso con sonido incluido si se prefiere. Este gesto debe repetirse unas 10 veces. A continuación, con la cara ya relajada respira profundamente y cuando exhales sopla empujando los labios ligeramente, como si quisieras apagar una vela. Este ejercicio, además de ser beneficioso para los labios, ayuda a mantener la línea de la mandíbula firme.

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Adiós a las arrugas en la frente

En este ejercicio lo que se tiene que hacer es cerrar los puños para que, con la parte de la mano que va de los nudillos a las puntas de los dedos, masajees toda la parte de la frente hasta llegar a ambas sienes. De esta manera se fortalecerá los músculos de la frente ayudando a que la piel se vea más firme y con las arrugas más difuminadas.

Para masajear esta zona de la cara también se puede usar un rodillo facial que ayudará a reducir las líneas de expresión y arrugas en la frente. La acción del rodillo activa la estimulación a nivel celular, mejora la producción de colágeno natural, libera la tensión del rostro y reafirma la piel aportando un efecto lifting.

Pómulos rejuvenecidos

Sin mover el cuello, mover los labios, mandíbula y toda la estructura facial hacia un mismo lado, izquierda o derecha. Utilizar una mano para estirar también la mejilla. Mantener en esta posición unos 10 segundos y repetir el ejercicio 5 veces en ambos lados del rostro. Con la realización de este ejercicio de forma regular se podrá ver cómo mejora la elasticidad de la piel de esta zona la cara.

Combate las ojeras

Se empieza bajando los párpados hasta dejar los ojos entrecerrados. Es importante no cerrar la vista por completo. Una vez con los párpados entrecerrados mira hacia un lado durante cinco segundos y luego hacer lo mismo hacia el otro. Después, abrir los ojos completamente para después volverlos a entrecerrar. Con los ojos aún entrecerrados, mirar hacia arriba unos 5 segundos y hacia abajo otros 5 segundos. Por último, y sin cambiar la postura de los ojos, haz un círculo con la mirada llevándola hacia la derecha, luego arriba, hacia la izquierda y hacia abajo.

Aunque no lo parezca, este ejercicio favorece la circulación sanguínea del rostro, ayuda a recuperar el tono de la piel, así como suaviza las bolsas y ojeras de manera natural. De esta forma, se podrá ver como rejuvenece la mirada y mejora el aspecto.