Nueve años después del éxito de "Sin City", los directores Frank Miller y Robert Rodríguez vuelven a unir sus mentes en una secuela llena de oscuridad, humor y seducción, mezclando esta vez en 3D la estética del cómic con la esencia de un film de acción.
"Sin City: A Dame to Kill For", que se estrena este viernes en Estados Unidos y a partir del 11 de septiembre en Latinoamérica como "Sin City: Una dama fatal", recupera a los personajes protagonizados por Mickey Rourke y Jessica Alba en la primera parte e introduce nuevas historias con Eva Green, Josh Brolin y Joseph Gordon-Levitt.
Rodríguez aporta en esta cinta su ingenio y habilidad con el 3D, una técnica que ya demostró dominar en "Spy-Kids 3-D: Game Over" (2003) y "The Adventures of Sharkboy and Lavagirld 3D" (2005), logrando que el espectador se convierta en un personaje más.
"Con el 3D, realmente sientes que estás dentro de una novela gráfica", explicó el director, de origen mexicano, durante una reciente rueda de prensa en Los Ángeles. "Y si hay una novela gráfica de calidad es 'Sin City'".
Las persecuciones, las peleas o los simples copos de nieve cayendo del cielo toman un significado narrativo mucho más relevante con esta tecnología.
Miller dijo que Rodríguez es de las pocas personas que ha logrado meterse en su mente, al punto que consiguió llevar a la gran pantalla estas historias creadas por él mismo en la década de 1990.
"Crecí leyendo cómics de superhéroes, pero después de un tiempo perdí el interés porque empezaron a parecer normales", relató.
"Tras ganar algo de mala fama y trabajar en Hollywood, decidí escribir el único cómic que nunca podría ser llevado a la gran pantalla, 'Sin City'. Pero entonces apareció este tipo", dijo divertido señalando a su codirector.
- Rodar a ciegas -
El personaje de Alba, Nancy, una bailarina que fue secuestrada, torturada y rescatada en la primera parte por Hartigan (Bruce Willis), sufre un cambio radical en la secuela.
"El amor de su vida se ha ido. Está destrozada, se ha convertido en una alcohólica, sigue bailando pero no está contenta", contó la actriz.
Nancy planea durante todo el film cómo vengarse del senador Roark (Powers Boothe), a quien culpa de la muerte de su amado, sacando a la luz un lado oscuro que conquistó a Alba.
"Ha sido muy interesante transformar a una dulce, inocente e ingenua víctima en una mujer poderosa", apuntó.
Green y Brolin protagonizan por su parte una historia de amor-odio que llega hasta las últimas consecuencias y centra gran parte de la película.
Ava es una mujer "inconsciente, sin ningún sentido de lo que está bien y está mal", contó la actriz francesa, quien ganó popularidad al convertirse en la "chica Bond" de "Casino Royale" (2006).
La actriz se pone en la piel de una "mentirosa compulsiva", extremadamente seductora, que hipnotiza a quien se proponga con sus profundos ojos verdes, sus carnosos labios pintados de rojo y su escultural cuerpo desnudo.
"Fue realmente un reto ser creíble y mentir al mismo tiempo, fue un reto interpretar a tantas mujeres a la vez, pero también fue divertido", aseguró.
Ambos actores dijeron haber trabajado un poco a ciegas, obligados a confiar en Miller y Rodríguez, porque sólo ellos sabían hacia dónde iba la película, en la que la cantante Lady Gaga hace un cameo.
"Es el tipo de film en el que tienes que darlo todo", declaró Brolin, cuyo personaje, Dwight, pide ayuda a Marv (Rourke) tras sucumbir a los encantos de Ava.
"Realmente no puedes manipular la película y sobre todo no puedes manipular la mente de Frank Miller", declaró. "Es otro nivel" de cine.
De la misma forma se sintió Gordon-Levitt, entusiasmado por haberse convertido en un personaje de cómic en un film de acción.
"Es perfecto, de alguna forma muchos actores hemos crecido viendo dibujos animados y en eso queríamos convertirnos", afirmó.