Este mes se conmemora el Día Mundial de la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), por lo que Royal Philips, en el marco de la contingencia actual por la pandemia, en donde los pacientes con este tipo de enfermedades tienen mayor riesgo de enfermar por covid-19, reitera la importancia de controlar los factores de riesgo, así como el seguimiento médico para identificar los síntomas, a fin de lograr la detección temprana y el tratamiento adecuado para este mal.

Aunque actualmente no hay una cura para la EPOC y tiende a empeorar con el tiempo, el diagnóstico oportuno es fundamental para controlar los síntomas de manera proactiva, puede hacer que los pacientes ralenticen la progresión de la enfermedad y puedan seguir realizando las actividades que más disfrutan.

Síntomas de la EPOC 

Existen varios síntomas reveladores que indican que una persona puede tener EPOC. Algunos de los más comunes son: tos que dura varias semanas o tos sin razón conocida (como un resfriado), tos con mucha mucosidad, falta de aliento, especialmente al realizar actividad física moderada, sibilancias (pitidos y ruidos al respirar), opresión en el pecho, color azul en los labios o los lechos ungueales (cianosis), infecciones respiratorias frecuentes, pérdida de peso involuntaria (en los estadios más avanzados), hinchazón en los tobillos, los pies o las piernas y cansancio, gripe o resfriados frecuentes.

Tratamientos

Los cambios en el estilo de vida y el tratamiento de los síntomas pueden ayudar a los pacientes a sentirse mejor, mantenerse más activos y convivir con la enfermedad. Juntos, usted y su médico pueden desarrollar una estrategia de control de la EPOC que incluya:

• Dejar de fumar y evitar los irritantes pulmonares (como polvo o humo).

• Desarrollar un plan de ejercicio y nutrición para ayudar al cuerpo a mantenerse fuerte.

•Utilizar los medicamentos, como broncodilatadores y esteroides a través de inhalocámaras y nebulizadores para asegurar la entrega del medicamento a nivel pulmonar.

• Mantenerse al día con las vacunas para prevenir enfermedades.

• Hacer rehabilitación pulmonar para mejorar la salud y el bienestar en general.

• Desarrollar un plan de acción para las exacerbaciones de la EPOC.