Practicar alpinismo o realizar excursiones por las montañas se han vuelto actividades cada vez más recurrentes, no solo para estar en contacto con la naturaleza sino también para explorar sitios con paisajes naturales increíbles. En este sentido y en ocasión de la conmemoración del Día del Montañista, el pasado 5 de agosto, la empresa de viajes Despegar Colombia hizo un recuento de seis destinos latinoamericanos icónicos para los viajeros aventureros, a quienes les encanta descubrir nuevos lugares a través de sus cumbres, picos y cordilleras.
México: Pico de Orizaba
Ubicado entre los estados de Veracruz y Puebla, este volcán activo tiene una altitud de 5.636 metros sobre el nivel del mar y se ha posicionado como uno de los lugares más solicitados para practicar montañismo profesional, senderismo y alpinismo, pues es considerada la montaña más alta de México. Para los no tan expertos, en el Parque Nacional Pico de Orizaba se puede hacer senderismo de media montaña, caminata o acampar y tener una fabulosa vista de este destino.
Argentina: El Chaltén
Este impactante escenario natural se localiza al borde de la zona norte del Parque Nacional Los Glaciares, en el extremo sudoeste de la Patagonia argentina. Es característico por sus bosques, lagos y miradores, donde es posible tener una vista única de sus montañas y glaciares. En 1994 fue denominado capital nacional del “trekking” (senderismo) por la gran variedad de senderos aptos para desarrollar esta actividad.
Perú: Montaña de los Siete Colores
Localizado a 170 kilómetros al sudoeste de Cusco, se encuentra este lugar conocido también como Vinicuncase, el cual forma parte de los Andes peruanos y se encuentra a 5.200 metros sobre el nivel del mar. Atractivo por sus cumbres teñidas de intensos colores fucsia, turquesa, lavanda y dorado, las cuales se deben a los diferentes minerales que componen el suelo de esta tierra. Puede conocerlo a profundidad haciendo una caminata que dura entre cuatro a seis horas.
Brasil: Montaña de Pico da Bandeira
El destino está localizado en el Parque Nacional Caparaó y la montaña es considerada la tercera más alta del país carioca y la que tiene el mayor aislamiento topográfico con 2.344 kilómetros. Suele ser una ruta muy accesible, ya sea desde Espírito Santo o Minas Gerais. Cabe resaltar que la temperatura en la cima puede alcanzar los -10 grados centígrados, siendo uno de los lugares más fríos de Brasil.
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Colombia: La Ciudad Perdida
Se encuentra en la Sierra Nevada de Santa Marta, una montaña cubierta de profunda selva tropical. Es una forma de disfrutar el ecosistema colombiano, donde se pueden explorar las ruinas de la Ciudad Perdida Teyuna, y de ahí recorrer la Sierra Nevada de Santa Marta, que se caracteriza por su densa selva y sus paisajes montañosos. Para Santa Marta, comprando anticipadamente, se pueden conseguir vuelos desde Bogotá a partir de los 180 mil pesos ida y vuelta.
Chile: Valle del Arcoíris
En el Desierto de Atacama, específicamente en la cuenca del Río Grande, se encuentra el Valle del Arcoíris, un lugar de ensueño único por sus cerros y sus múltiples tonalidades de colores, gracias a que están combinados con las sales blancas y el cielo azul del sitio. Hay excursiones donde se puede caminar entre montañas de colores y descubrir vestigios prehistóricos en las rocas.
“El montañismo es una de las opciones para realizar turismo de naturaleza, a través del cual el viajero puede conocer y disfrutar un paisaje inolvidable, mientras se desconecta del estrés de la ciudad y recarga baterías para su regreso. Nada mejor que realizar esta actividad en los maravillosos paisajes latinoamericanos, llenos de fauna y flora única”, comentó Inés Hochstadter, country manager de Despegar Colombia, Perú y Ecuador.