Una paquistaní de 15 años se saca una foto con el teléfono en una pose estudiada, lo típico entre la generación selfi, pero contrariamente a muchos adolescentes occidentales no la colgará en internet, disuadida por la moral conservadora reinante.
La llegada del internet móvil de alta velocidad en 2014, al que hoy un 15% de los paquistaníes tiene acceso, y la explosión de las ventas de smartphones provocaron un 'boom' de las redes sociales.
Hoy es más fácil que nunca encontrar información sobre temas tabú en Pakistán, como el sexo, y los jóvenes que tienen acceso a internet son relativamente libres en línea.
Pero en esta república islámica, donde la familia y la religión promocionan valores muy conservadores, publicar un selfi puede ser arriesgado.
"Ya no puedo posar en mis fotos, ya no lo hago, porque la gente te juzga", explica esta adolescente a la AFP bajo condición de anonimato.
"No puedes publicar una foto tuya en la calle con tus amigos, porque tu familia, tus amigos o tus profesores te van a criticar", añade. "Van a decir 'te comportas como una puta' o '¿Por qué sonríes?'".
"Es por eso que ya no cambio la foto de mi perfil", cuenta.
Su historia es similar a la de otros estudiantes de su colegio, un establecimiento privado para la clase media de Islamabad. Bajo anonimato, cuentan cómo utilizan internet.
"Todo es siempre sobre religión. Vivimos en una república islámica. El islam no aprueba que las mujeres exhiban sus brazos o piernas, ni las interacciones entre mujeres y hombres, y la gente critica según esos criterios", explica un chico de 14 años. Cuenta que una vez fue regañado por publicar una foto donde aparecía con una chica.
- 'Quiero ser como tú' -
Pero cada vez más personas intentan librarse de las presiones sociales a través de internet, en un país en donde se calcula que los dos tercios de la población tienen menos de 30 años.
El día de San Valentín, la estrella local de las redes sociales, Qandeel Baloch, posó con un vestido púrpura, con un profundo escote, yendo en contra de un mensaje del presidente paquistaní que pidió a la juventud de su país no celebrar esa fiesta "occidental".
"Pueden impedir a la gente salir pero no amar", declaró en un video publicado en Facebook, en el que calificó a los políticos de "idiotas repugnantes".
Baloch despierta admiración y desprecio, pero su mensaje causó furor entre los jóvenes cansados de que otros dicten sus comportamientos. Fue visto más de 830.000 veces.
"La gente se vuelve loca, especialmente las chicas. Recibo tantas llamadas de mujeres que me dicen que soy su inspiración, que quieren ser como yo", dijo a la AFP.
- Fiel a sí mismo -
Las reglas vigentes en la sociedad pueden cambiar totalmente en el ciberespacio, subraya un joven de 13 años.
"Cuando están en internet, hay chicos que escriben a las chicas 'Hola bebé, ¿quieres salir?'", cuenta, lo que hace estallar a carcajadas a sus compañeros. Incluso hubo un caso contrario, dice, lo que provoca nuevas risas. "Una chica me escribió para pedirme que seamos amigos. ¡Me dio un susto!".
Una niña de 15 años añade que los medios sociales son una plataforma única de expresión.
"En la escuela no siempre puedes decir lo que piensas. En los medios sociales, puedes ser más explícito sobre lo que te gusta. Puedes ser tú mismo".
"En un país musulmán, no está bien visto hablar cara a cara con un chico, por lo tanto, algunas chicas lo hacen en línea", explica otra chica, consciente de que hay un riesgo ya que "hay personas que utilizan cuentas falsas".
Y aunque ya no publica selfis, la paquistaní de 15 años hace un llamado a sus compañeros a afirmarse más en internet, en lugar de refugiarse detrás de los tabúes culturales.
"No podemos acusar a la sociedad de todos los males", estima. "No se puede ser cobarde toda la adolescencia y no hacer nada. ¡Podemos hacer cosas en las redes sociales!"