SUELE decirse que el primer viaje en pareja es la prueba de fuego para cualquier relación. En esta situación se comparten todas las horas del día, transformándose en un espacio para conocerse en distintas situaciones. Este contexto puede resultar en una grata experiencia o en la peor posible. Para evitar esto último hemos diseñado un listado de 6 tips que ayudarán a prevenir problemas y harán que ambos disfruten de la estadía, vuelvan más enamorados y con ganas de emprender nuevos viajes.
Organizarlo juntos: Es importante que ambos se involucren en la organización del viaje, tanto en la elección del destino, actividades y excursiones, como en la planificación general. Es necesario conversar de forma relajada para conocer las expectativas del otro y en base a esto tomar decisiones. Una vez elegido el destino puede ser una buena idea que cada uno investigue por su cuenta para luego compartir la información y finalmente hacer las reservas y compras necesarias.
Evitar viajes largos: Ya que se trata del primer viaje juntos y compartir mucho tiempo es lo que genera mayor preocupación, será ideal evitar viajes largos. Es una buena idea elegir lugares cercanos, una escapada que dure un fin de semana o pocos días. Pueden investigar destinos que se acerquen a los intereses de cada uno. Si en este contexto la relación no resulta como esperaban no será necesario tener que compartir demasiado tiempo para que cada uno vuelva a su hogar.
Compartir gastos: Así como es importante decidir y planificar juntos, es necesario que los gastos sean compartidos. No tiene sentido viajar a lugares caros en los cuales sólo uno de los dos pueda pagarlo. Entonces, para evitar sentimientos desagradables respecto del dinero, lo mejor es ir a un sitio accesible que se encuentre dentro de un presupuesto real para ambos.
Permitirse momentos de privacidad: Compartir todo el día juntos puede ser muy cansador por lo que es aconsejable generar pequeños momentos de soledad. Disponer de tiempo para comunicarse con amigos, por teléfono o a través de las redes sociales, salir a pasear o simplemente dormir una siesta son espacios que deben permitirse. Separarse un poco y respetar la privacidad del otro sin lugar a dudas aportarán un clima más relajado.
Permanecer abiertos a cambios inesperados: Es imposible estar siempre conformes y a gusto con todo, por lo que será de vital importancia tener una actitud receptiva frente a los sentimientos del otro y mostrarse flexible a posibles cambios que puedan ir surgiendo. Que ambos disfruten debe ser la prioridad y para esto nada mejor que afrontar un problema o percance con una sonrisa.
El diálogo ante todo: Como último consejo será necesario que si surgen problemas o diferencias estas puedan convertirse para evitar que se transformen en una molestia mayor. Hablar y escuchar al otro es la base del entendimiento, juntos deben resolver cómo enfrentar estas situaciones y acortar cualquier distancia.