Oskar, un niño de 9 años que perdió a su padre en los atentados del 11- s en Nueva York, fue proyectado fuera de concurso en la Berlinale.
Adaptada de la novela del escritor Jonathan Safran Foer, "Extremely loud and incredibly close", publicada en 2005, esta película del cineasta inglés Stephen Daldry, conocido por sus filmes "Billy Elliot", "Las horas" y "La lectora", es sostenida sobre todo por la actuación del niño Thomas Horn, quien en la época de los atentados "debía andar gateando, pues sólo tenía tres años", como el mismo declaró.
La tragedia que causó más de 3.000 muertos en las torres gemelas de Nueva York es vista a través de los ojos de su personaje.
En la mañana de ese martes 11 de septiembre de 2001 las clases en las escuelas fueron suspendidas y al regresar a su casa Oskar oye en el contestador telefónico los mensajes que ha ido dejando su padre, interpretado por el conocido actor Tom Hanks, quien se encontraba en una cita de trabajo en el piso 60 de uno de esos rascacielos.
El niño comienza a comprender lo que está pasando y cuando ve por la televisión derrumbarse las torres cae al suelo. La tristeza y el dolor lo hacen volverse agresivo, incluso contra su madre, interpretada por la hermosa Sandra Bullock.
Para consolarse el pequeño Oskar, que acostumbraba a jugar con su padre a resolver todo tipo de enigmas, escarbará un día entre sus cosas y encontrará una misteriosa llave que le llevará a lanzarse, ayudado por su imaginación, en la búsqueda de la cerradura adecuada.
"El autor del libro parte de la historia de esta familia que trata de superar el duelo, que trata de recomponerse. Jonathan Safran hace en su libro un paralelo entre el bombardeo de Dresde, durante la Segunda Guerra Mundial, y los atentados del 11 de septiembre. Oskar con su búsqueda trata de darle un sentido a esos hechos. Uno de sus abuelos, interpretado por Max Von Sydow, es de origen alemán", explicó Daldry.
"Me sorprende que no haya habido más películas sobre el 11 de septiembre. Me parece que también hay mucha materia para realizar filmes sobre las consecuencias que tuvieron esos ataques, sobre todo en Irak y Afganistán", añadió.
Daldry dijo que la película había sido proyectada en Estados Unidos a varias asociaciones de familiares de las víctimas de los atentados. "Quisimos trabajar muy cerca de ellos. No queríamos falsear nada ni ofender a nadie", afirmó.
El veterano actor sueco Max Von Sydow, inolvidable sobre todo en las películas de Ingmar Bergman, y nominado al Oscar por su actuación en este filme, declaró que trabajar al lado del pequeño Thomas Horn había sido "una bendición".
Su personaje es mudo a causa del traumatismo que sufrió durante la Segunda Guerra. "Era un desafío no hablar. Era algo nuevo para mí. Uno siempre tiene que probar cosas que nunca había hecho", declaró.
AFP