El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, indultó simbólicamente a un pavo el miércoles siguiendo una arraigada tradición en la Casa Blanca en víspera del Día de Acción de Gracias, uno de sus feriados más importantes en el país.
"La Presidencia, el cargo en el que se tiene más poder en el mundo, trae consigo muchas responsabilidades imponentes y solemnes... esta no es una de ellas", aseguró Obama en una breve ceremonia en la entrada norte de la Casa Blanca, con Popcorn, un hermoso pavo blanco de 17 kilos, a su lado.
Popcorn le ganó a otro pavo, Caramel, en una consulta organizada por la Casa Blanca en las redes sociales Facebook y Twitter para elegir qué ave sería perdonada el miércoles, reveló Obama, flanqueado por sus hijas adolescentes Sasha y Malia, ambas luciendo sonrisas tensas.
Pero Caramel "seguirá vivo, ya está recaudando dinero para su próxima campaña", bromeó Obama, quien regresó el martes de tres días de reuniones electorales en la costa oeste del país.
Aunque Popcorn fue el centro de atención el miércoles, disfrutando de una bendición presidencial devenida en gesto casi pontificio frente a decenas de cámaras, Caramel también se salvará.
Los dos pavos serán enviados a Mount Vernon, residencia del primer presidente estadounidense George Washington, ubicada a 20 kilómetros al sur de la capital federal, donde permanecerán durante la temporada de fiestas navideñas, para luego ser llevados a una histórica casa de campo en Virginia (este).
Acción de Gracias (Thanksgiving), una de las fiestas más observadas por los estadounidenses, se remonta a los primeros años de la colonización del actual territorio de Estados Unidos en los años 1620, cuando los europeos recién instalados tenían la tradición de dar gracias a Dios por la abundancia de la cosecha y la ayuda recibida por parte de los nativos.
Esta fiesta es para muchos estadounidenses la única ocasión anual de reunirse en familia. Muchos suelen viajar grandes distancias para realizar una cena en la que el pavo relleno es la estrella del menú, que también incluye pan de maíz y tarta de calabaza.
Unos 45 millones de pavos no tendrán la oportunidad de Caramel y Popcorn y terminarán en el horno.
El gremio de los criadores de pavo estadounidenses suelen regalarle un ave al presidente desde la época de Harry Truman, después de la Segunda Guerra Mundial (1939-45). El miércoles será la 66 ceremonia de este tipo, aunque fue recién a partir de George Bush, en 1989, que los presidentes han tomado la costumbre de ejercer su derecho de gracia sobre un ave.