A falta de sacar discos nuevos, Oasis y Led Zeppelin siguen alimentando las tiendas de discos este mes de octubre, con la reedición de álbumes que hicieron historia en el rock, una práctica habitual de las discográficas en tiempos de crisis.
Desde los Beatles a Michael Jackson, pasando por Pink floyd y Portishead, cada fecha aniversario es una ocasión para sacar nuevos "clásicos", remasterizados.
Para Oasis, 2014 marca los 20 años del comienzo de una avalancha que, acompañada por grandes guitarras, sacudió primero a Inglaterra y luego a todo el planeta hasta su separación en 2009, con más de 70 millones de álbumes vendidos.
Después del primer álbum "Definitely Maybe" (1994), reeditado en mayo, el segundo disco de los hermanos Gallagher, "(What's The Story) Morning Glory?" (1995) acaba de sacar a su vez dos CD de suplementos. El tercer álbum, "Be Here Now" (1997), saldrá en breve.
A fines de octubre también saldrán dos álbumes de Led Zeppelin, incluyendo el infaltable "IV" (con "Stairway to Heaven"). Los tres primeros álbumes habían sido reeditados en junio, poniendo nuevamente de moda al legendario grupo de hard rock, que descansaba desde 1980 y cuyo resurgimiento siempre había sido descartado por el cantante Robert Plant a pesar de la insistencia del guitarrista Jimmy Page.
El grupo británico Portishead también marcó los 20 años de su primer álbum, "Dummy", con una reedición en vinilo a fines de agosto. Pink Floyd, mientras esperaba su nuevo álbum en noviembre, también sacó su último álbum hasta la fecha, "The Division Bell" (1994).
El primer argumento de las casas disqueras y de los artistas se refiere en primer lugar al sonido, de mejor calidad gracias a la remasterización de los discos.
El argumento técnico no convence a Florent Mazzoleni, autor del libro "L'Odyssée du rock" (La Odisea del rock). "Quizás se escuche la diferencia cuando se está en el estudio, pero en caso contrario, hay que ser verdaderamente experto o tener equipos excelentes para percibirla", dijo.
"Se trata simplemente de una cuestión de revender el 'viejo catálogo' (las antiguas grabaciones), aunque tenga el mérito de hacer una selección entre los discos importantes y secundarios", destacó.
Por su parte, las casas disqueras sostienen que no se trata de explotar "la máquina de hacer dinero".
Esas reediciones realmente permiten "reunir una discoteca" y "que las jóvenes generaciones que no conocieron a esos artistas las descubran", afirma Jean-Luc Marre, director de publicidad de Pias, el sello que reedita a Oasis.
Otro punto de interés es "romper el mercado de los coleccionistas aficionados". En su opinión, la próxima reedición en vinilo de los álbumes de Nick Cave permitirá que nuevamente sean accesibles los primeros álbumes del rockero australiano que, actualmente, "no se encuentran a menos de 100 euros (unos 126 dólares)".