Dos hombres encapuchados y armados robaron el miércoles una joyería de lujo en Cannes, en la Costa Azul, tres días después de que se registrara en la ciudad francesa un robo récord de alhajas de un valor de 103 millones de euros.
Según una fuente cercana a la investigación, un primer hombre entró, como si fuera un cliente, en la tienda Kronometry, que se encuentra frente al palacio del festival de cine, llevando una granada, antes de hacer entrar a su cómplice, quien tenía un arma.
Ambos amenazaron al encargado y los tres vendedores y les pidieron que abrieran los escaparates, sin usar sus armas. Se desconocía el valor de lo robado, pero los ladrones se apoderaron de unos 40 relojes pulsera, antes de darse a la fuga.
Un robo de 150 relojes pulsera por un valor estimado en un millón de euros ya había tenido lugar en Kronometry en febrero pasado. El robo tuvo lugar en pleno día y duró menos de 10 minutos, durante la hora del almuerzo de uno de los empleados. Los ladrones pasaron por un edificio vecino y perforaron un ventanal que daba a un patio trasero.
El de este miércoles es el segundo robo de este tipo en pocos días en La Croisette de Cannes, una de las principales calles con tiendas de lujo de Francia. El domingo, con una simple pistola automática y el rostro camuflado con un pañuelo y una gorra, un hombre asaltó el lujoso hotel Carlton de Cannes y escapó con un botín récord.
El valor estimado del robo del domingo es de 136 millones de dólares, unos 103 millones de euros, un monto estimado superior al del golpe de 2003 contra el Diamond Center de Amberes, en Bélgica, cuando una banda se hizo con joyas por un valor estimado en 100 millones de euros.
En estos últimos meses se han registrado otros importantes robos de joyas en Cannes y su región.
Así, en mayo pasado, durante el conocido festival de cine, hubo un robo de joyas marca Chopard por un valor de 1,4 millones de dólares. Chopard fabrica la célebre Palma de Oro y presta sus alhajas a las estrellas y personalidades que participan en el festival.
Una semana después, también en mayo, fue robado un collar de diamantes de un valor de dos millones de euros del joyero suizo De Grisogono durante una fiesta en el lujoso hotel Eden Roc del Cabo de Antibes, en el marco del Festival de Cannes.