El Premio Nobel de Medicina 2013 fue otorgado el lunes a dos estadounidenses, Randy Schekman y James Rothman, y al alemán Thomas Südhof, por su investigación sobre transportes intracelulares, útiles para algunos tratamientos.
Estos tres científicos fueron recompensados por sus innovadores trabajos sobre el sistema de transporte en el interior de la célula, para que "las moléculas sean transportadas al lugar correcto de la célula en el momento adecuado", según el Comité Nobel.
Sus descubrimientos tuvieron un enorme impacto en la comprensión de la forma en que su carga es entregada dentro y fuera de la célula y tienen implicaciones en los trabajos sobre diversas enfermedades, incluyendo los desórdenes neurológicos e inmunológicos, así como sobre la diabetes, explicó el Comité Nobel.
Schekman declaró a la AFP que se sintió conmovido cuando recibió la llamada de Estocolmo.
"Mi reacción cuando me enteré fue de incredulidad y alegría", afirmó este profesor de 64 años que enseña la biología molecular y celular en la Universidad de Berkeley (California, Estados Unidos).
Rothman, un profesor de 62 años y director del Departamento de Biología Celular en la Universidad de Yale (Estados Unidos), dijo por su parte a la Radio Sueca que se sentía "extremadamente honrado" de ganar este premio.
Los tres llevaron a cabo sus trabajos de investigación en forma independiente.
Cada célula es una fábrica que produce y exporta moléculas. "Por ejemplo, la insulina es fabricada y luego liberada en la sangre y señales químicas llamadas neurotransmisores son enviadas de un nervio al otro. Esas moléculas son transportadas en la célula en pequeños paquetes llamados vesículas", explicó el jurado.
Estos científicos galardonados con el Nobel de Medicina "han descubierto los principios moleculares que rigen la forma en que esta carga es entregada en el lugar correcto de la célula en el momento adecuado", agregó.
Schekman es el pionero de los tres. Comenzó su investigación en los años '70, cuando comenzó a estudiar la base genética de la célula utilizando como modelo a la levadura.
Descubrió que las células de la levadura que tenían una maquinaria de transporte defectuoso creaban un sistema similar al de un sistema de transporte público mal organizado. Comprendió que la causa de la congestión era genética y prosiguió identificando a los genes que habían mutado.
En los años '80 y '90, Rothman comenzó a estudiar el transporte de las vesículas en las células de los mamíferos.
"Rothman, Schekman y Südhof establecieron el mecanismo sofisticado que permite el transporte y la liberación de las moléculas en las células", destacó el comité.
Rothman, nacido en 1950, obuvo su doctorado en Harvard, pasando luego por el Massachusetts Institute of Technology y la Universidad de Stanford (California). En 2008 regresó a la costa este, a Yale. "Descifró el mecanismo de las proteínas que permite a las vesículas fusionarse con sus blancos para permitirles transferir su cargamento", añadió.
Südhof, de 58 años, obtuvo su doctorado en la Universidad de Göttingen. Vive en Estados Unidos desde 1983 y enseña en Stanford desde 2008. "Reveló la forma en que las señales dan instrucciones a las vesículas para que liberen su carga con precisión", señaló el jurado.
En los años '90 estudió "la precisión temporal" de las células, para las cuales "todo está en el timing", según el comité Nobel.
Este trío sucede al médico e investigador japonés Shinya Yamanaka y al biologista británico John Gurdon, galardonados en 2012.
El Premio de Medicina es el primero de la temporada de los Nobel 2013. Será seguido por la Física el martes, la Química el miércoles, la Literatura el jueves, la Paz el viernes y la Economía el lunes.