La problemática estrella estadounidense de cine Lindsay Lohan vio rechazada su solicitud para retirar dos de los tres cargos que pesaban en su contra en el proceso por un accidente de auto donde fue acusada de mentirle a la policía, según un juzgado de Los Angeles (oeste).
El juicio por este caso fue confirmado para el próximo 18 de marzo.
La actriz de 26 años, domiciliada en Nueva York desde enero pasado, no se desplazó al tribunal este viernes, dejando solamente a su abogado local, Mark Heller, frente al juez.
El 15 de enero pasado Lohan se había declarado no culpable del accidente, ocurrido el 8 de junio de 2012 en Santa Monica (oeste de Los Angeles), en la autopista que corre a lo largo de la costa del océano Pacífico.
Al comparecer ante la policía tras el accidente Lindsay Lohan aseguró que no se encontraba al volante entonces, lo que resultó ser mentira, según la investigación.
La actriz es procesada por obstrucción a la autoridad, falsas declaraciones y conducción imprudente.
Estos delitos podrían constituir una violación de su libertad condicional, en el marco de otro caso por el robo de un collar, y supondría para la estrella, en caso de condena, una enésima estancia en prisión.
Su abogado había depositado una solicitud para reclamar que fueran depuestos los cargos de obstrucción a la autoridad y de declaración falsa, afirmando que su cliente fue interrogada en un hospital de Santa Monica tras el accidente, sin la presencia de un abogado.
El juez James R. Dabney no accedió a la demanda y confirmó los tres cargos de la acusación. Un acuerdo entre la fiscalía y Lindsay Lohan para evitar un juicio no fue mencionado durante la audiencia.
Lohan, más presente en los medios por sus escándalos que por su trabajo cinematográfico, interpretó recientemente el papel de Elizabeth Taylor en una película para televisión, pero las críticas generales recibidas no fueron buenas.
AFP