El exobispo paraguayo de Alto Paraná, Rogelio Livieres, destituido por el papa Francisco debido a malos manejos administrativos, falleció en Buenos Aires de una enfermedad hepática, informó una fuente eclesiástica en Asunción.
Livieres, perteneciente a la congregación del Opus Dei, había sido apartado por el Vaticano en setiembre de 2014, luego de sostener una larga y ácida polémica.
A finales de julio pasado lo visitaron en su lecho de enfermo el arzobispo de Asunción, Edmundo Valenzuela, y su sucesor en el cargo, el obispo de Alto Paraná, Guillermo Steckling.
Livieres había sido destituido del cargo luego de una intervención de la Santa Sede en la diócesis a su cargo, tras denuncias de manejos desprolijos en materia administrativa y cuestionamientos a su sistema de consagrar sacerdotes con solo cuatro años de estudio. Los estudios, tradicionalmente duran seis años.
También fue cuestionado por apoyar a un sacerdote argentino, Carlos Urrutigoity, investigado por abuso de menores en Estados Unidos/AFP.