El guitarrista Paul Kantner, confundador de Jefferson Airplane -banda pionera del rock psicodélico- y que publicó un diario con su experiencia en la Nicaragua sandinista en los años ochenta, murió el jueves a los 74 años en San Francisco.
Famoso por su defensa del uso de las drogas, Kantner murió por un fallo multiorgánico tras padecer un ataque cardíaco, según dijeron allegados a la prensa.
Con éxitos como "Somebody to Love" y "White Rabbit", los Jefferson Airplane escribieron himnos sobre todo para el movimiento hippie y el memorable "Verano del amor", en que miles de jóvenes tomaron literalmente San Francisco en 1967.
En los años ochenta Kantner viajó a Nicaragua para conocer de cerca el proceso de la revolución sandinista y de ese periplo quedaron como testimonio un libro y un album en que cantó poemas del activista guerrillero guatemalteco Otto René Castillo.
La Academia de Grabación (Recording Academy) emitió un comunicado para expresar su congoja por la muerte. "La comunidad musical ha perdido a un verdadero icono", expresó la organización, que definió a Kantner como "un gigante del rock/folk y un participante integral de la etapa del rock de los 60".
Jefferson Airplane fue una de las primeras bandas en actuar en el Fillmore club de Bill Graham, uno de los epicentros de la música hippie que también vio nacer a los Grateful Dead, Janis Joplin y The Doors.
Como iconos de la contracultura, los Jefferson Airplane fueron cabeza de cartel en dos de los festivales emblemáticos de la época: Monterrey (California, 1967), donde la participación de la banda se transformó en un álbum en vivo, y dos años más tarde actuaron en Woodstock, donde comenzaron su presentación en la noche del sábado y terminaron a las ocho de la mañana del domingo.
- "Maravillosa exploración" -
Nacido en San Francisco, Kantner tuvo a lo largo de su vida acceso a las más variadas influencias en una ciudad cuya filosofía, como a él mismo le gustaba decir, era romper todas las reglas.
En 1969 escribió el himno "We Can Be Together" (Podemos estar juntos) después de escuchar un lema del naciente movimiento de las Panteras Negras. "Somos obscenos, no tenemos ley, odiosos, peligrosos, sucios, violentos y jóvenes pero deberíamos permanecer juntos", finaliza el tema.
En una entrevista de esa época con la revista Rolling Stone, Kantner rechazó el que se caracterizara a su música como violenta. "Violenta en los términos de transformar violentamente lo que está pasando, no es una violencia de volar edificios", dijo.
Kantner defendía abiertamente el consumo de drogas, particularmente la libertad de permitir el disfrute del LSD y abogaba también por la legalización de la marihuana, mientras calificaba al alcohol como "el peligro mayor".
Siempre describió sus viajes con LSD como "el tiempo más formativo de mi vida" y en una declaración hecha el año pasado al Sarasota Herald-Tribune dijo que esta droga psicodélica "me dio lo que yo siempre esperé que la religión me diera".
Durante algún tiempo Kantner tuvo una relación con la cantante Slick, con quien tuvo una hija, China, cuyo nacimiento inspiró la canción "A Child Is Coming".
Con Slick creó en los años setenta una banda paralela, los Jefferson Starship, cuyo sonido más ligero dio lugar a varios éxitos pero que al mismo tiempo le ganó criticas por sus concesiones a un sonido más comercial. Decepcionado Kantner rompió con el grupo en 1984.